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Conceptos de guerra – 1era. parte

Por: Vladimir Adrianza Salas

Con el pretexto de finalizar la guerra en el Pacífico, EE.UU. lanzó las bombas sobre Hiroshima y Nagazaki en Japón en 1945; desde allí, las implicaciones de la guerra en el mundo cambiaron. Ya no se trataba de acciones focalizadas en un territorio específico, sino que la guerra tendría como teatro de operaciones el planeta entero.

Hasta ese momento, todas las guerras habían sido «calientes», es decir, con acciones militares entre los bandos en pugna. En la mayoría de los casos eran guerras declaradas por los jefes de Estado antes de emprender sus acciones bélicas, jugando la diplomacia algún papel, tanto para el Estado que oficialmente declaraba la guerra como para el que se defendía.

Sin embargo, la Alemania nazi no declaró la guerra a la URSS en 1941, invadiendo su territorio y exterminando durante 4 años de conflicto, a 20.6 millones de personas.

Con la aparición del arma nuclear, 1945 constituyó un punto de inflexión en la historia universal en materia de guerras. Para ese momento y por cuatro años, los Estados Unidos de América detentaron el monopolio del poder nuclear sobre el resto de las naciones en el mundo; se proyectaba desde esa nación una amenaza global, excepcionalmente, dicha nación poseía un arma, la cual, le permitiría coaccionar al planeta entero.

Pero afortunadamente, ese monopolio no duraría mucho. En 1949, la URSS detonó su primer artefacto nuclear en el polígono de tiro de Semipalatinsk-URSS; esto puso fin al monopolio de las armas nucleares que ostentó por cuatro años, los Estados Unidos de América del norte en la década de los 1940s.

Sin embargo, las amenazas estaban presentes. Amparado en su inmenso poder militar, industrial, financiero y comunicacional, así como, en los organismos diplomáticos que controlaba (la ONU y luego la OEA), la dirigencia estadounidense, el stablisment, tomó la decisión de intervenir en diversas naciones en el mundo de aquel entonces, bajo el pretexto de la expansión del comunismo argumentado por Hans Morgentau y particularmente por George F. Kennan, a nivel internacional, para garantizar la libertad y la democracia que occidente y los EE.UU.,  dicen defender.

El orbe quedó pues dividido en dos bloques hasta 1991, cuando la historia registra la caída de la URSS, país que constituyó un verdadero freno a las pretensiones hegemónicas occidentales y particularmente, atlantistas, en todo el mundo.

Sin embargo, pocos saben aun hoy día, que la URSS estuvo amenazada por los planes de guerra estadounidense, alguno de los cuales pretendían hacer uso de armas nucleares sobre territorio soviético. Una suerte de guerra preventiva nuclear planificada por el occidente, encabezado por los EE.UU. sobre la URSS.

La operación Dropshot, había sido proyectada por los EE.UU.  sobre la URSS, inicialmente para inicios de 1950. La detonación de la bomba nuclear soviética el 22 de agosto de 1949, postergó dicha operación, la cual fue proyectada para 1957, como indican varias fuentes.

Mientras tanto, desde 1945, diversas operaciones se habían proyectado sobre la URSS. La «Operación Impensable», concebida por el premier inglés, Winston Churchil, había proyectado una invasión de la URSS inmediatamente después de finalizada la toma de Berlín por el Ejército Rojo, haciendo uso de tropas europeas, del ejército de EE.UU. acantonado en Europa y lo más impresionante, haciendo uso de tropas alemanas, las mismas que habían invadido la URSS 4 años antes, las mismas que habían sido derrotadas por el Ejército Rojo en esos momentos.

Posteriormente, una campaña de sobre vuelos se proyectó sobre la URSS. Ingleses y estadounidenses, realizaron un largo número de operaciones de sobrevuelo, mismas que formaron parte de una campaña de acoso que se proyectaba sobre la URSS mientras a la gente común en occidente, tanto en los países centros como en la periferia, se le infundía miedo diciendo, allí vienen los rusos, los soviéticos, que desean esclavizarlos con el «comunismo».

Inglaterra proyectó y realizó estas operaciones haciendo uso de cuatro modelos de aviones desarrollados en la posguerra, uno de los cuales fue el Avro 698 Vulcan que, a partir de 1953, regularmente voló los cielos soviéticos armado con bombas nucleares.

Los sobrevuelos sobre territorio de la URSS también fueron hechos por los estadounidenses, quienes se dieron cuenta en uno de los sobrevuelos, de la detonación de la bomba atómica soviética en 1949.

Dichas operaciones tuvieron un histórico desenlace, cuando el avión «Lockheed U-2», apodado «Dragon Lady», fue el derribado sobre la Unión Soviética, el primero de mayo de 1960.

A partir de allí, los ingleses hicieron cambios sobre su programa de sobrevuelos para cancelarlos totalmente, poco tiempo después, dado que ya no podían seguir volando sobre la URSS impunemente. Estos aviones podrían ser derribados dadas las capacidades de interceptación que había adquirido la URSS para ese momento.

A la par de lo anterior, para ese momento, la Unión Soviética había desarrollado la llamada «bomba nuclear Tsar» llamada también, la Bomba del Zar, la bomba Emperador o El Emperador de las bombas, cuyas siglas fueron «RDS-220» y «RDS-202», el más poderoso artefacto nuclear creado en el planeta hasta el presente, que obligó a occidente y particularmente a los Estados Unidos, a sentarse a la mesa de negociaciones, para tratar el tema de regulaciones sobre ensayos y el arsenal nuclear, entre las dos grandes potencias del entonces.

Podríamos decir irónicamente, que 50 megatones de diplomacia soviética, fueron necesarios para golpear por un momento, la arrogancia de los líderes occidentales del entonces, quienes habían desarrollado una estrategia de acoso y contención sobre la URSS, basadas en las teorías de George F. Kennan.

Sin embargo, fueron los acontecimientos de 1962 los que llevaron a un cambio radical en las estrategias de guerra desarrollados por las agencias de inteligencia occidental, para intentar mantener su hegemonía militar mundial.

El histórico hecho de la crisis de los misiles de 1962, como es conocido el incidente donde EE.UU.  confirmó la existencia en Cuba de misiles soviéticos de mediano alcance, que apuntaban al territorio de los EE.UU., lo que ha dado origen a las más diversas teorías y conceptualizaciones sobre la guerra que los teóricos occidentales han creado.

La guerra económica, las campañas mediáticas, las invasiones militares a diversos países pequeños, los golpes de Estado principalmente en Sur América y el Caribe, se ha migrado a los conceptos de guerra que se ejecutan hoy día. Pero, en sí, la guerra entre los factores de poder mundial, ha continuado.

De allí la aparición de teorías sobre las guerras por generaciones, la guerra irregular, la guerra mediática, las operaciones psicológicas, la guerra económica, la guerra no convencional, la guerra proxy, la guerra irrestricta y particularmente, la Guerra Híbrida; planteamiento teórico que gobierna las operaciones del decadente imperio occidental capitaneado por los Estados Unidos, aplicada sobre Venezuela durante más de 10 años y sobre la Federación de Rusia actualmente.

Lo que significa cada concepto lo trataremos en próximas entregas. Por ahora, solo recordaremos que Venezuela ha sufrido al menos desde 2013 hasta el presente, una Guerra Híbrida, llamada también, multiforme o no convencional, misma que ha incluido una secuela de operaciones psicológicas centradas en el poder mediático de grandes transnacionales de la información occidental, bloqueos económicos, operaciones de sabotaje telemático y cibernético, acciones diplomáticas, intentos de magnicidio y operaciones de desembarco de mercenarios en nuestras costas, hechos de los cuales, empiezan a destaparse con claridad en la prensa internacional en estos momentos.

Tal como hemos señalado, al igual que a Venezuela, una Guerra Híbrida está siendo aplicada a la Federación de Rusia desde tiempos del Euro-Maidán en 2014 y particularmente acentuada, desde el 24 de febrero del presente año. La intensidad de esa guerra y sus repercusiones a nivel planetario, han sido diseñadas en función del tamaño de la nación que es objeto de tales ataques.

Por supuesto, la repercusión de la Guerra Híbrida desarrollada en contra de Rusia actualmente, tiene un impacto global, debido al tamaño de su economía y de la importancia geoestratégica de ese país en el mundo contemporáneo. Las acciones diseñadas en contra de la Federación Rusa, repercuten en la economía mundial en su conjunto. Sin embargo, el concepto es el mismo que el que ha sido aplicado a Venezuela, guerra de la cual aún no hemos salido.

En próximas entregas continuaremos con el desarrollo de estos temas, para beneficio de todas y todos.

Por: Vladimir Adrianza Salas

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