Seis nuevas investigaciones que involucran al presidente Jair Bolsonaro, abrió este jueves, la Procuraduría General de la República (PGR), de Brasil abrió a partir de los elementos aportados por la Comisión Parlamentaria Investigadora (CPI) la cual analizó lo que llamó “graves negligencias en la gestión de su Gobierno frente a la pandemia de Covid-19”.
En total, la PGR presentó al Supremo Tribunal Federal (STF) diez solicitudes de investigación, que en este momento son analizadas por los seis magistrados relatores de esa Corte a quienes se asignaron los casos.
De acuerdo con el informe final de la CPI, Bolsonaro podría ser señalado por delitos contra la salud, incitación al delito, uso irregular de fondos públicos y crímenes de lesa humanidad, entre otros.
Se le cuestiona por malversación y la existencia de un posible esquema de corrupción en torno a la compra sobrevalorada de la vacuna india Covaxin.
También se menciona a sus hijos Flávio y Eduardo Bolsonaro, como parte de una red para difundir noticias falsas en el contexto de la pandemia, el informe mostró deficiencias en la gestión de los titulares de Defensa, Walter Braga Netto; de Salud, Marcelo Queiroga y el de Transparencia, Wagner Rosário.
Lo anterior, ha sido calificado en el informe “como red criminal para difundir información falsa contra las medidas preventivas antipandémicas y las vacunas”. También aparecen señalados diputados seguidores de Bolsonaro, como Bia Kicis, Carla Zambelli, o Carlos Jordy.
En total, 76 personas y dos empresas aparecen en el informe, que fue entregado el pasado 27 de octubre al fiscal general, Augusto Aras.
Vale destacar, que Brasil acumula hasta la fecha 615.179 decesos y 22.118.782 de personas contagiadas con la Covid-19.
Expertos en temas sanitarios consideran que una parte significativa de esas muertes e infecciones pudo evitarse si Bolsonaro no hubiera persistido en su negacionismo de la pandemia y de la efectividad de las vacunas, y si hubiera actuado frente al SARS-CoV-2 según una estrategia que priorizara a la salud y el ser humano antes que a las ganancias corporativas.
T/TeleSur/LRDS