El movimiento indígena de Ecuador inició, este miércoles, un diálogo con el Gobierno para solucionar las demandas sociales, en medio de reclamos por nuevas descalificaciones por parte del presidente de la República, Guillermo Lasso.
#Atención
Eustaquio Tuala, presidente de la @FEINE_EC, ratificó la voluntad de diálogo del Movimiento Indígena, rechazó las descalificaciones malintencionadas de @LassoGuillermo, y pidió respeto y transparencia al proceso de diálogo.#conaie pic.twitter.com/fGiac42QUD— CONAIE (@CONAIE_Ecuador) July 13, 2022
«No podemos aceptar que se nos siga acusando de que se han pagado ocho dólares a cada manifestante y que recibimos fondo del narcotráfico», afirmó Leonidas Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie).
El movimiento indígena ratifica su voluntad, propuestas y capacidad de diálogo, @LeonidasIzaSal1 expresó, "venimos con humildad pero no podemos permitir ser humillados", se debe parar las descalificaciones desde el gobierno, a la par del diálogo hay ya más de 400 criminalizados. pic.twitter.com/SactorsPZb
— CONAIE (@CONAIE_Ecuador) July 13, 2022
El diálogo abrió oficialmente esta jornada en cumplimiento de la metodología adoptada por las partes la semana pasada, como preámbulo a esta reunión que tomará 90 días y tratará 10 puntos ajustados por el Gobierno y los sectores sociales representados por la Conaie, la Feine y la Fenocin.
Iza reafirmó la decisión de avanzar en la mesa de diálogo, tomada junto al Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine) y la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin), protagonistas del paro nacional efectuado del 13 al 30 de junio pasado junto a otros colectivos sociales.
Sin embargo, insistió en que si continúan las acusaciones e intentos de imponer una verdad inexistente, también se verán obligados a adoptar una posición al respecto.
En ese sentido, pidió a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, en su condición de mediadora del proceso, solicitar al Ejecutivo que invite al mecanismo de los pueblos ancestrales, a través del relator del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de las Naciones Unidas.
«En las mesas debe quedar claro que luchamos como pueblos y nacionalidades sobre un derecho, más no vinculados a los procesos que se nos está acusando como el narcotráfico», recalcó.
Sobre las negociaciones, consideró necesario que la Conferencia Episcopal permita el acceso de otros actores en calidad de veedores del proceso, para evitar cualquier tipo de inclinación hacia una parte específica.
La atención especializada a los subsidios de los combustibles y Banca Pública y Privada serán los tópicos iniciales de debate; entre otros, como son el Fomento Productivo, Empleo y derechos laborales, Energía y recursos naturales, Derechos Colectivos y Educación Superior, Protección a inversiones nacionales, Control de precios, Acceso a Salud y Seguridad.
Se espera que cada tema tome un período de tres a cinco días entre el análisis y las soluciones puntuales a definir.
El diálogo fue pactado en el Acta por la Paz firmada entre el movimiento indígena y el Ejecutivo el pasado 30 de junio, que dio por finalizadas las movilizaciones realizadas por 18 jornadas a nivel territorial y nacional, en demandas de respuestas a la situación agobiante de la mayoría de la población.
T/PrensaLatina/LRDS
