El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, presentó este domingo pruebas sobre la participación de los opositores Leopoldo López y Juan Guaidó en planes conspirativos contra el país, incluído un ataque terrorista contra la sede del poder legislativo que iba a perpetrarse los primeros días del año.
En rueda de prensa desde el Palacio Federal Legislativo, en Caracas, mostró confesiones del desertor excapitán Juan Gutiérrez Aranguren, capturado recientemente por los organismos de seguridad de Venezuela, quien confesó sobre su entrenamiento en tres campamentos en Colombia para incursiones armadas contra nuestro territorio, ubicados en Río Hacha, Santa Marta y La Goajira.
El diputado Rodríguez indicó que López y Guaidó se han involucrado en el entrenamiento de desertores, homicidas y paramilitares en Colombia, así como mantenían alianzas con narco paramilitares colombianos «que hacen vida en la frontera occidental de Venezuela con Colombia», específicamente en la región de La Goajira y el Norte de Santander.
Gutiérrez Aranguren hizo una confesión voluntaria, acogiéndose al sistema de delación estipulado en las leyes venezolanas, corroborando las denuncias que ha realizado el Gobierno Bolivariano en los últimos meses.
Allí, narró que se graduó como oficial en la promoción de 2010 y tras ejercer varias tareas, fue asignado al Centro Nacional de Procesados Militares, en Ramo Verde, estado Miranda, donde se encargó de la custodia de Leopoldo López.
En el lugar desarrollaron una afinidad y luego el 28 de febrero de 2019 atiende el llamado de Guaidó, «de los gobiernos de Donald Trump y de Iván Duque» y deserta de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
Es así, como viaja a Colombia y allí fue contactado por López, quien lo invita a entrenarse en un campamento de Maicao, con el propósito «de derrocar al presidente Nicolás Maduro».
T/ AVN/ LRDS
