
El Senado de Argentina rechazó el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) lanzado por el presidente Javier Milei en diciembre, que desregula amplios sectores de la economía, y eventualmente podría quedar completamente anulado en la Cámara de Diputados.
Tras un extenso debate, la iniciativa obtuvo 42 votos en contra, 25 a favor y cuatro abstenciones. El argumento central de los senadores que votaron en contra fue el de la «inconstitucionalidad», teniendo en cuenta que establece múltiples modificaciones de leyes vigentes sin el aval del Poder Legislativo.
«Resulta rechazado; se comunicará a la honorable Cámara de Diputados y al Poder Ejecutivo», anunció la vicepresidenta del Ejecutivo, Victoria Villarruel, quien convocó a la sesión parlamentaria que generó tensiones dentro del Gobierno libertario, ya que Milei tenía intenciones de postergar el debate para abocarse a las negociaciones del Pacto de Mayo y el tratamiento de un nuevo proyecto de ley ‘ómnibus’, más acotado y menos ambicioso que el que naufragó en la Cámara de Diputados en febrero.
El gobierno de Argentina cuestionó al Senado por haber rechazado el ‘megadecreto’ emitido por el presidente Javier Milei en diciembre y denunció que la decisión es un intento por «socavar» al Ejecutivo.
«La misma Cámara que ha habilitado casi 500 decretos de necesidad y urgencia (DNU) durante el kirchnerismo, se ha encargado de rechazar el DNU del presidente Javier Milei a solo tres meses de su asunción (…) Resulta imposible interpretar esta decisión de otra manera que como un intento de socavar el Pacto de Mayo, el Gobierno Nacional y el cambio elegido por los argentinos», dice un comunicado emitido por la Oficina del Presidente.
Minutos antes de ese comunicado, la vicepresidenta de Argentina, Victoria Villarruel, quien también ocupa el cargo de titular del Senado, cuestionó el resultado de la votación.
«Los que nos trajeron hasta acá siguen obstruyendo», declaró en un video publicado en sus redes sociales.
En medio de las tensiones internas en el Ejecutivo libertario, la vicemandataria reafirmó su «compromiso inclaudicable» con Argentina y con Milei. «No me voy a convertir en Cristina Kirchner», dijo en alusión a los enfrentamientos que la líder peronista mantuvo con su excompañero de fórmula y presidente Alberto Fernández.
Por su parte, el vocero de la Presidencia, Manuel Adorni, fue consultado por el conflicto y aseguró que «no hay ningún problema en la relación» entre el presidente Milei y la vicepresidenta Villarruel.
«No hay ningún tipo de interna, ni de pelea ni ninguna otra cuestión que tenga que ver con algún enfrentamiento con la vicepresidente de la Nación. Muy por el contrario, somos todos un gran equipo de trabajo», manifestó Adorni en su habitual rueda de prensa.
T: Sputnik/RT Actualidad/LRDS