
El 17 de diciembre de 1982, Hugo Rafael Chávez Frías y un grupo de militares patriotas inspirados en el pensamiento de El Libertador Simón Bolívar, juraron ante el mítico Samán de Güere -ubicado entre Turmero y Maracay- romper las cadenas históricas de la pobreza y la miseria en el país heredadas de la cuarta República.
Ese día Hugo Chávez, Felipe Acosta Carlez, Jesús Urdaneta y un grupo no precisado de oficiales y suboficiales preocupados y molestos por la situación imperante en el país deciden organizar el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 que nace como un instrumento para combatir la corrupción en las Fuerzas Armadas de entonces.
El Juramento del Samán de Güere está basado en reconocer a los excluidos y a los pobres que «poblaban los cinturones de miseria» en el país.
Así nació el movimiento llamado «Ejército Bolivariano Revolucionario 200″. Al año siguiente, cambia su denominación no sólo de nombre, sino en el ideario que lo sustentaba.
Pasó a llamarse “Movimiento Bolivariano Revolucionario 200” en honor al Bicentenario del Natalicio de El Libertador.
Los protagonistas eran en aquel entonces, jóvenes llenos de ímpetu, quienes procuraban implantar en Venezuela una verdadera democracia con un altísimo contenido social, que abriera espacios de participación y al pueblo.
Juramento del Samán de Güere
Este 17 diciembre se conmemora el 192º aniversario de la siembra del Padre de la Patria Simón Bolívar y coincide con el 40° aniversario del Juramento del Samán de Güere hecho por Chávez y otros oficiales.
El juramente simboliza el inicio de la Revolución Bolivariana emprendida por el Comandante Chávez y así se expresaron hace 40 años:
“Juro por el Dios de mis padres, juro por mi patria, juro por mi honor que no daré tranquilidad a mi alma ni descanso a mi brazo hasta no ver rotas las cadenas que oprimen a mi pueblo por voluntad de los poderosos. Elección popular, tierras y hombres libres, horror a la oligarquía.”
Este Juramento Bolivariano se convirtió en el compromiso realizado de manera clandestina por todos los miembros oficiales del Movimiento Bolivariano Revolucionario – 200 (MBR-200) que ingresaron antes del año 1992.
Promesa del Samán de Güere inspirado en Juramento del Monte Sacro
La promesa del Samán de Güere está inspirado en el juramento que realizó El Libertador Simón Bolívar en el Monte Sacro (15 de agosto de 1805), en compañía de su profesor Simón Rodríguez. Desde allí juró luchar sin tregua por la libertad de la Patria.
Los aspirantes a pertenecer al movimiento debían ser postulado por un miembro activo de la organización y éste a su vez era presentado al Directorio General del MBR-200, el cual decidía si era aceptado.
Documentos revelan que durante los meses anteriores a la insurrección militar de 1992 se dejó de hacer el juramento y el candidato pasó a ingresar directamente.
Juramento del Samán de Güere vinculado a genocidio de los arawak
El Samán de Güere era el árbol sagrado de los arawak y fue exactamente entorno a este árbol que se consumó uno de los genocidios más terribles contra la etnia indígena, arawak, por los invasores españoles.
Señalan que para los años 1524-1526 cuando llegaron los españoles, en su afán por la conquista y para adueñarse de las nuevas tierras, atacaron a los arawak atando a cientos de hombres, mujeres y niños entorno al tronco de este Samán de Güere.
Se precisa que para el año 1492 la tribu local arawak era próspera, todos vivan en torno a su Dios «El Samán de Güere» el cual estaba rodeado con 13 piedras algo esféricas y achatadas en su parte superior.
Asimismo, las piedras no invadían la sombra del follaje y estaban en perfecta ubicación circular al Samán de Güere, detrás de cada piedra, a su vez, estaba sembrada una planta de Chaguaramos que los arawak llamaban (araugua / arawuac/ arawuak).
Samán de Güere simbolizaba al Dios Chamán
El Samán de Güere simbolizaba al Dios Chamán encarnado, y los chaguaramos a los indígenas arawak ante el universo, los indígenas caribes adoptaron dicha palabra recordando sus guerras en contra de los arawak.
Debajo de la sombra del samán sólo era permitido alimentarse, previo a haberse bañado en el Sagrado Río Tuelaw (hoy río de Turmero).
El tuétano de los huesos de los animales era condimentado con «aji chirel», y se usaba para comerlo junto a una especie de galleta redonda de yuca hoy conocida como casabe.
Los integrantes de la etnia que estuviesen amonestados por algún motivo no podían comer debajo del Samán, lo hacían a su alrededor sin pasar el límite de las piedras. Debajo del Samán nacían todos los niños arawak para recibir la protección divina.
Canto arawuak recuerda a la india Hirimay
Por otra parte, cuenta la leyenda que entre los arawuak había una indígena llamada Hirimay que debajo del Samán entraba en suave trance y con voz profética contaba historias a los niños de la tribu.
«Cuando ya no estemos con vida en esta tierra todavía vivirá nuestro Dios, aunque con el tiempo caerá por el olvido de los nuevos hombres, algunas manos de gente buena le levantará, el quedará en el alma de todo de quien le conozca nuestro dios árbol, el Samán de Güere nunca morirá…».
El Juramento del Samán de Güere ideado por Hugo Chávez constituye un reconocimiento a los invisibilizados de ese entonces, por las élites del poder representadas por los gobiernos corruptos de la cuarta República y se convirtió en el inicio de la Revolución Bolivariana liderada por el Comandante y continuada por el Presidente Nicolás Maduro.
Día de la Lealtad a Chávez: Un canto de amor revolucionario
Fuente: Del Samán de Guere al Por Ahora /es.slideshare.net / Correo del Orinoco
Foto: @nicolasmaduro y archivo