Opinión/ Trazos de Historia: Ayacucho, Hija destacada de la Batalla de San Félix de Guayana
Por el ingeniero Ovidio Figueroa Salazar

Algunos dirán que está afirmación o posición, es de un fanático. Sobre todo pensaran así los prejuiciados, que no analizan lo que dice o hace determinada persona, sin examinar su planteamiento o acción.
Le pregunto a esos prejuiciados: ¿Quién era Simón Bolívar para fines de abril de 1817?. Pues, un hombre con un proyecto en la cabeza, empeñado en triunfar, pero sin tropas conque poder llevarlo a cabo, producto de sus varias y grandes derrotas militares en la Segunda República y en lo que iba de la Tercera, recuérdese a La Puerta, Aragua de Barcelona, Ocumare de La Costa y Clarines perdidas en fila.
¿Qué fue lo que levantó a Bolívar y lo hizo vencer en las campañas rematadas con éxito, por si o a través de Antonio José de Sucre, y otros, en las importantes y sucesivas batallas de Pantano de Vargas, Boyacá Carabobo, Bombona, Pichincha, Junín y Ayacucho? Pues, sin lugar a dudas, la trascendental Campaña de Guayana, del entonces General de División Manuel Piar.
Cuando Bolívar, sin mayores progresos en Barcelona luego de su derrota en la zona de Clarines, decidió ir personalmente a la Provincia de Guayana, donde operaba Piar con aciertos desde cuatro meses antes, apenas pudo llevar una reducida escolta de treinta hombres. Que cuadro tan distinto al que le describió al Almirante Luis Brion el 18 de abril siguiente desde Ipire, luego de visitar la región y entrevistarse con Piar!. Le dijo textualmente: El 25 de marzo partí de la ciudad de Barcelona hacia Guayana con el propósito de traerme la División del General Piar… Tuve el placer de revisar un ejército poderoso y bien disciplinado .. Al observar el estado de nuestros negocios en esa provincia, he dejado en libertad a los señores Generales Piar y Cedeño, para que terminasen la reducción de esa provincia…
El once de abril anterior, Piar había triunfado tan aplastantemente en San Félix, coronando magistralmente su Campaña de Guayana, que al regresar a Guayana a últimos de ese mismo mes, Bolívar ascendió a Piar a General en Jefe el doce de mayo, y dijo a su primo el Coronel Leandro Palacios, el dieciséis, cuatro días más tarde: La victoria que ha obtenido el General Piar en San Félix, es el mas brillante suceso que hayan alcanzado nuestras armas en Venezuela.
Piar entregó a Bolívar en el orden de tres mil quinientos hombres, fogueados, armados, pertrechados y con alta moral de combate. Y con ellos, un territorio extenso, rico en vacunos, caballos y las apreciadas mulas; comunicado con el resto de Venezuela, la actual Colombia y los países enemigos de España, a través del Orinoco y su red de afluentes.
Después vino todo lo demás: Angostura capital provisional de Venezuela, el semanario Correo del Orinoco, Angostura sede del tercer Congreso de Venezuela, el nacimiento de la República de Colombia en Angostura y todo lo posterior, cuando Bolívar saco el ejercito de las fronteras de Venezuela y lo llevo hasta el Perú libertando pueblos, con la colaboración fundamental de un hijo de mi tierra natal, de la porción de la Provincia de Cumana, que hoy lleva su nombre.
En Ayacucho, sabana de los Andes Peruanos, el cultivado y curtido General de División Antonio José de Sucre, daría la batalla definitiva. Sucre, que tuvo a Piar entre sus maestros iniciales, en las tres heroicas Batallas de Maturín en 1813, siempre contra tropas muy superiores en número y dotación, que incluyeron al propio Capitán General de Venezuela, el Capitán de Navío Domingo Monteverde.
En Ayacucho, mandando Generales de distintas nacionalidades suramericanas, venció Sucre en gran forma al Teniente General (General en Jefe) José de la Serna. Ayacucho fue la acción militar de mayor tamaño, de mayor número de combatientes, ocurrida en América Latina durante sus Guerras de Independencia, con unos dieciséis mil combatientes para algunos historiadores y mas de veintiún mil para otros, y la que sepultó al Imperio Español en América.
Con razón el General Bartolomé Mitre, personalidad argentina dijo en su obra monumental Historia de San Martin y la Revolución Suramericana, que Sin San Félix no habría habido Ayacucho (…) Tenemos motivos los venezolanos, y particularmente los sucrenses y los piaristas, para conmemorar la gran Batalla de de Ayacucho.
T: Ingeniero Ovidio Figueroa Salazar.