
El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, viajará este jueves a Honduras para reunirse con su homóloga, Xiomara Castro, y será el último viaje que haga antes de que asuma el poder el 14 de enero próximo.
El equipo de Arévalo de León también confirmó que dentro de su gira de trabajo nunca estuvo contemplado viajar a Nicaragua y que su retorno a Guatemala será el viernes 5 de enero.
La reunión con Castro busca reforzar las relaciones bilaterales.
Arévalo de León reveló que la primera acción que tomará al asumir el poder el 14 de enero será revocar decretos “irresponsables” y “absurdos” del Gobierno saliente del mandatario, Alejandro Giammattei.
A criterio de Bernardo Arévalo de León, el presidente Giammattei le entrega un poder Ejecutivo “terriblemente debilitado” porque “la corrupción no solo roba el dinero” sino que “atrofia las instituciones”.
El mandatario electo advirtió que «los golpistas van a seguir intentando cualquier cosa, pero están desesperados. Saben que se les termina el control y saben que vamos a iniciar a exponer las cosas que han hecho en sus cargos, pero no tendrá éxito. No hay duda de que vamos a asumir».
Sobre la incertidumbre que ha existido en los últimos meses por un posible golpe de Estado, el presidente electo respondió que “no hay lugar a dudas” al respecto, y que las recientes resoluciones de la Corte de Constitucionalidad, máximo tribunal del país, son contundentes en cuanto a la defensa de la decisión expresada en las urnas el año pasado.
El 1° de septiembre pasado, Arévalo de León acusó públicamente a la jefa del Ministerio Público (Fiscalía), Consuelo Porras, de estar detrás de un intento de “golpe de Estado” para evitar que asuma la presidencia el 14 de enero.
“Yo espero que Consuelo Porras renuncie el día que yo tome posesión y se lo voy a reiterar”, enfatizó este miércoles Arévalo de León, al ser cuestionado sobre cómo visualizaba el escenario de Gobernar con Porras aún al mando de la Fiscalía.
El proceso de transición de Arévalo de León al poder ha sido inédito, debido al acompañamiento internacional que ha recibido de parte de entidades como el Gobierno de los Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos (OEA).
La expectativa de la población guatemalteca sobre el Gobierno entrante recae principalmente en la capacidad que Bernardo Arévalo de León demuestre para cumplir su promesa de atacar frontalmente la corrupción y detener el deterioro democrático que el país ha sufrido en las últimas administraciones públicas.
“Combatir la corrupción es lo más trascendental porque es la causa por la que estamos en la cola de los índices de desarrollo de la región y tenemos que rescatar las instituciones públicas”, concluyó el presidente electo.
T: RT Actualidad/EFE/LRDS