Gobierno Bolivariano y representante regional de FAO visitan Base de Misiones en Cota 905
Bajo el liderazgo del vicepresidente Sectorial de Planificación, Ricardo Menéndez

El vicepresidente Sectorial de Planificación, Ricardo Menéndez, realizó este martes una visita a la Base de Misiones «Villa Zoila» en la Cota 905, Caracas, en la que estuvo acompañando por el representante regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en América Latina y El Caribe, Mario Lubetkin.
Durante el recorrido, el también ministro de Planificación informó que Venezuela y la FAO están próximos a firmar un marco de cooperación, con los valores del sistema de Naciones Unidas, que se caracteriza por el respeto a la soberanía y a la autodeterminación del pueblo venezolano.
«Es un marco de cooperación fundamentado en las políticas de desarrollo y en el reconocimiento del desarrollo como un derecho humano fundamental».
DEMOCRACIA DEL PUEBLO
Menéndez enfatizó que la Revolución Bolivariana se ha caracterizado por ser una democracia con un rol de reconocimiento del pueblo y de cambio en todos los valores sobre la población.
«Cuando empieza la revolución bolivariana éramos 900.000 personas técnicos y universitarios. Hoy somos 5 millones de técnicos y universitarios. Prácticamente se quintuplicó la población que estaba en capacidad de estudio».
TERRITORIALIZACIÓN Y PODER POPULAR
El vicepresidente resaltó que en el recorrido por la Base de Misiones se pudo observar el trabajo que se ha venido realizando en cuanto a la territorialización y al trabajo del poder popular.
«Nuestras estadísticas no son proyecciones por estado, no son proyecciones por parroquia, no son proyecciones por municipio, nacen de la casa, nacen de la persona».
POLÍTICA DE RESILIENCIA
El vicepresidente sostuvo que el pueblo venezolano ha aprendido a ser resiliente, a raíz de las políticas públicas que ha tenido que desarrollar el presidente de la República, Nicolás Maduro, como consecuencia de la guerra económica que el imperio norteamericano le ha declarado al país.
«A nuestro pueblo le ha tocado aprender en carne propia qué es la resiliencia, cómo se construye, cómo se hace».
El ministro colocó como ejemplo el Programa de Alimentación Escolar, PAE, que tenía cerca de un millón y medio de atenciones y pasó a cinco millones y medio de escolares atendidos.
Menéndez también subrayó que en el año 2015 se hizo una contracción del mercado y hubo una reducción del 40% de la disponibilidad de alimentos que se producían en el país, eso derivó en el nacimiento de los CLAP, en el 2016, para poder garantizar el abastecimiento de productos a la población.
«A medida que se generaban, y se siguen generando presiones inflacionarias del mercado, se crean mecanismos de transferencia directa a la población».
NUEVOS DESAFÍOS
El ministro comentó que los CLAP tienen actualmente un desafío que ha sido alertado permanentemente por el presidente: «les falta cada vez con más fuerza la P, que la P es de producción», indicó el vicepresidente.
«En la producción local hay un desafío enorme que todavía nos falta».
Por su parte, Lubetkin afirmó que el acuerdo estratégico que se firmará entre la FAO y el gobierno de Venezuela está pensado a largo plazo, pues «toda política de seguridad alimentaria hay que pensarla en años, y no en semanas ni en días», aseguró el funcionario.
Finalmente, Lubetkin sentenció que en ese contexto, y desde el punto de vista de la FAO, las bases de este acuerdo radican en generar «resiliencia y sostenibilidad a largo plazo», concluyó el funcionario.