El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken y el vicepresidente de China, Han Zheng, sostuvieron una reunión al margen de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que se celebra en Nueva York en la cual destacaron la importancia de mantener una buena relación bilateral.
Han opinó que la relación entre los dos países es “la más importante” del planeta, y remarcó el “compromiso” de China para estabilizar los lazos entre ambas potencias.
El funcionario chino admitió que los dos países enfrentan “muchos retos y dificultades” en su relación bilateral y reivindicó que necesitan “ser más sinceros y esforzarse más” para encauzar la situación.
“El mundo necesita que la relación entre Estados Unidos y China sea saludable y estable», dijo.
Tras describir el desarrollo de China como una oportunidad más que un desafío, una ganancia más que un riesgo para EEUU, Han dijo que las dos partes bien pueden contribuir al progreso de la otra y lograr la prosperidad común.
Aseveró que China mantiene coherencia y estabilidad en su política hacia EEUU, siguiendo los tres principios propuestos por el presidente Xi Jinping, a saber, el respeto mutuo, la coexistencia pacífica y la cooperación con ganancias compartidas, a la hora de considerar y gestionar los nexos entre los dos países.
Han expresó la esperanza de que EEUU trabaje con China para llevar adelante el importante consenso alcanzado por los dos jefes de Estado en Bali, Indonesia.
A su parecer, ambas partes deben tomar medidas prácticas, crear condiciones favorables y aportar más para mejorar el entendimiento, la confianza mutua y la cooperación recíprocamente beneficiosa, a fin de que las relaciones entre China y EEUU vuelvan a una vía sana y estable y generen beneficios para los dos países y el resto del mundo.
Blinken, por su parte, aseguró que EEUU busca fortalecer la comunicación con China, gestionar las diferencias y promover la cooperación.
El funcionario norteamericano recordó los últimos “contactos de alto nivel” que ha habido en los últimas semanas entre los dos Gobiernos con el objetivo de “mantener abiertas las líneas de comunicación”.
“Para Estados Unidos, la diplomacia cara a cara es la mejor manera de lidiar con los temas en los que no estamos de acuerdo y de explorar áreas de cooperación. El mundo está esperando a que gestionemos esta relación de forma responsable”, relató Blinken.
El jefe de la diplomacia estadounidense y el vicepresidente chino se vieron tan solo un día después de que el ministro de Exteriores de China, Wang Yi, y el asesor de Seguridad de la Casa Blanca, Jake Sullivan, se reunieran en Malta para hablar de la situación de Taiwán y la guerra de Ucrania.
Además, Blinken visitó en junio pasado Pekín, un viaje que luego han repetido la secretaria del Tesoro, Janet Yellen; el enviado especial para el Clima, John Kerry, y la secretaria de Comercio, Gina Raimondo.
China condena a Estados Unidos por incluirla en la lista de drogas
China instó a Estados Unidos a dejar de atacarla y calumniarla, tras la publicación de un memorando presidencial estadounidense que la identifica como uno de los principales países de tránsito o producción de drogas ilícitas.
Mao Ning, vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, enfatizó que la «designación» de Estados Unidos es infundada y de naturaleza maliciosa, afirmó que China se opone firmemente a ella y ha presentado solemnes gestiones ante la parte estadounidense.
Igualmente, señaló que el Gobierno chino concede gran importancia al control de las drogas y hasta la fecha ha clasificado 456 tipos de sustancias como controladas bajo sus leyes relacionadas con esta supervisión, lo que le convierte en uno de los países con más estupefacientes bajo vigilancia en el mundo y con los controles más estrictos.
«Sin duda, China es un modelo de gobernanza global en materia de drogas, es el país que está implementando sus políticas antidrogas de la manera más estricta y exhaustiva, y esto es ampliamente reconocido por la comunidad internacional», añadió.
Asimismo, indicó que Estados Unidos, que representa menos del 5 por ciento de la población mundial, pero consume el 80 por ciento de los opioides del mundo, se encuentra entre los países con la mayor demanda de estupefacientes y no tiene derecho a criticar el trabajo de control llevado a cabo por China.
T: Xinhua/Agencias/LRDS
