Las plazas Bolívar son espacios para el encuentro con la historia

El programa Bolívar Nuestro, coproducido por el Centro de Estudios Simón Bolívar (CESB) y La Radio del Sur, estuvo dedicado al análisis del origen y el valor patrimonial, histórico e identitario de las plazas Bolívar presentes en cada una de las ciudades del país como lugares de encuentro del pueblo venezolano.

Los conductores de este espacio radial, Rosanna Álvarez y Alejandro López, presidente del CESB, entrevistaron a Dulce Medina, quien ha desarrollado un importante trabajo en los espacios públicos patrimoniales y afirmó que las plazas Bolívar son lugares para relacionarse con la historia y rendir tributo a su Libertador.

En cuanto a los orígenes, la arquitecta que forma parte del equipo del CESB, explicó que tras la invasión europea, los españoles impusieron su reglamento para fundar las ciudades basadas en la creación de una cuadrícula cuyo corazón era la llamada plaza mayor o plaza de armas, y de allí se construían alrededor lugares de interés político como la iglesia, las instituciones de gobierno, se demarcaban las principales calles y se definía la actividad comercial y religiosa.

Comentó que en sus investigaciones encontró indicios de asentamientos indígenas en el Valle de Caracas, “pero esas huellas fueron borradas para implantar la cuadrícula fundacional de la ciudad que era la manera en la que se desarrollaban los territorios ocupados”.

El historiador Alejandro López agregó que además de ser un sitio de reunión, las plazas tenían otras funciones: “tenían fuentes de agua, la población iba a la plaza a recoger agua, a lavar y a enterarse de lo que pasaba”. “Era centro de celebración y hay registros de cómo se organizaban ceremonias para la jura del algún rey, paradas militares conmemorativas, oficios religiosos”.

Así, “la plaza tenía un carácter de uso cotidiano (…) la plaza de Caracas fue la plaza mayor, la plaza de armas, el mercado por casi un siglo, por lo cual se construyeron unos arcos para dar espacio a los puestos del mercado”, y en 1872 el entonces presidente Antonio Guzmán Blanco la nombra plaza Bolívar”, expuso Medina.

“Guzmán Blanco venía generando transformaciones urbanas en una ciudad que hasta ahora era muy estática en su crecimiento y desarrollo, comienza a incorporar algunos elementos de influencia francesa, se construyen paseos, bulevares y nuevos espacios como el primer parque de Caracas, El Calvario, hoy conocido como parque Ezequiel Zamora”, dijo.

López recordó que la plaza Bolívar de Caracas guarda un gran significado histórico, porque allí han ocurrido hechos trascendentales de nuestra historia. “Allí se ajusticio a José Leonardo Chirinos y a José María España, allí comenzó la revolución patriota en América con el 19 de abril de 1810 y uno de los más recientes recuerdos, muy triste, es el día del pase a la inmortalidad del Comandante de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, allí se reunió el pueblo tras la noticia”, expresó.

Una plaza en cada pueblo

A partir del modelo colonial caraqueño, “se generó un patrón repetitivo, que en pocas ciudades varía (…) tenemos plazas Bolívar como las de Maracay que rompe con ese esquema de la cuadrícula”, indicó la arquitecta Medina.

Comentó que muchas de las parroquias caraqueñas tienen su plaza Bolívar, es una forma de homenajear al Libertador, ya que el pueblo tiene la necesidad de recordar su historia. Antímano, La Vega, 23 de Enero y El Valle son algunas de los sectores que han construido su propia plaza y en La Dolorita por ejemplo, tiene un esquema distinto.

De allí que en la parroquia El Paraíso surgió el proyecto de construir una plaza Bolívar, a través del Diplomado Vida y Obra del Libertador Simón Bolívar.

Medina destacó que “el Gobierno Bolivariano apuesta por el espacio para la transformación urbana, ampliar los espacios de encuentro y disfrute, asociados con la figura del Libertador y gracias a la Misión Venezuela Bella se han construido nuevas plazas Bolívar, mientras otras se han embellecido y recuperado”.

T: Prensa CESB/LRDS