Las Fuerzas Armadas de Yemen anunciaron que atacarían a los buques y buques de guerra estadounidenses en el Mar Rojo si Estados Unidos participara en un ataque y agresión contra la República Islámica de Irán junto con el enemigo israelí.

El portavoz de las Fuerzas Armadas de Yemen, el general de brigada Yahya Saree, afirmó que las fuerzas armadas están monitoreando y observando todos los movimientos en la región, incluidas las acciones hostiles contra Yemen. Enfatizó que los líderes yemeníes, con la ayuda de Dios, tomarán las medidas legítimas necesarias para defender la querida patria y a su orgulloso pueblo.

Agregó que Yemen, con su gran pueblo, su liderazgo fiel y su ejército muyahidín, apoyará a cualquier país árabe o islámico expuesto a la agresión sionista, o que decida enfrentar esta agresión en defensa propia o en apoyo de los muyahidines de la resistencia palestina.

Subrayó que Yemen no abandonará a sus hermanos en la Franja de Gaza y no permitirá que la entidad criminal respaldada por Estados Unidos implemente sus planes en la región.

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La declaración de las Fuerzas Armadas de Yemen reiteró la posición de principios e inquebrantable de Yemen de rechazar la agresión sionista contra nuestros hermanos en Gaza, Líbano y Siria, y cualquier país árabe o islámico sujeto a dicha agresión, como se afirmó en declaraciones anteriores.

La batalla contra el enemigo israelí, se enmarca en crímenes cometidos por la entidad

La declaración enfatizó que la batalla contra el enemigo israelí, el agresor contra Irán, se enmarca en una serie de crímenes cometidos por esta entidad, desde el genocidio contra el pueblo palestino, pasando por los continuos ataques contra los pueblos libanés y sirio, hasta la agresión contra Yemen, y finalmente a una agresión integral contra la República Islámica de Irán, bajo el lema «Cambiar la cara del Medio Oriente».

La declaración indicó que el enemigo israelí busca controlar completamente la región, implementar el plan sionista con el abierto apoyo estadounidense y una asociación directa, e intentar eliminar a la República Islámica de Irán, a la que ve como el mayor obstáculo para la realización de su proyecto.

La declaración enfatizó que cualquier agresión estadounidense contra Irán, en apoyo a la entidad israelí, persigue el mismo objetivo: permitir que el enemigo controle toda la región. Esto no se permitirá, ya que significa confiscar la libertad, la independencia y la dignidad de la nación, esclavizarla, humillarla, borrar su identidad, ocupar sus territorios, saquear sus riquezas y establecer la igualdad de la violación de la sangre, el honor, la tierra y los lugares sagrados.

La declaración concluyó enfatizando que la batalla es la batalla de toda la nación, y que la salvación, la dignidad y la victoria residen en la movilización y la yihad por el amor de Dios Todopoderoso.

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