El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que la nación latinoamericana no podría romper el lazo económico y comercial con Estados Unidos, debido a la fuerte cercanía entre ambos países, misma que ha atravesado por tensiones ante la discusión sobre la reforma al Poder Judicial mexicano.
«Ya no sería posible una ruptura en las relaciones económicas y comerciales con EEUU. Sería un caos para ellos y también para nosotros, porque nos complementamos. Hay muchos bienes que ellos consumen y se producen en México, y también nosotros necesitamos de las inversiones y tecnología de EEUU», expresó en conferencia de prensa.
«Lo que está de por medio es ese afán de querer sentirse superior y colocarse como gobierno del mundo, sin respetar la soberanía de los pueblos», precisó el mandatario mexicano. Asimismo, López Obrador estimó que este vínculo y el que se sostiene con Canadá serán más prósperos en el sexenio de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, que inicia el 1 de octubre.
«Considero que cualquiera que sea resultado, quien gane en las elecciones presidenciales estadounidenses va a tener una muy buena relación. No habrá ningún problema. Ella es una mujer inteligente, bien formada, con experiencia y honesta», apuntó.
Balance comercial entre México y EEUU es de 78.638 millones de dólares
De acuerdo con la Secretaría de Economía mexicana, el balance comercial neto entre México y EEUU es de 78.638 millones de dólares en lo que va de 2024, siendo la nación latinoamericana la principal socia comercial de la nación gobernada por el presidente Joe Biden. Mientras tanto, en la situación entre México y Canadá, el balance es de 1.180 millones de dólares a lo largo de este año.
AMLO sostiene discrepancias con el embajador de EEUU en México
Desde el 22 de agosto, López Obrador sostiene discrepancias con el embajador de EEUU en México, Ken Salazar, por sus críticas hacia la propuesta para cambiar al Poder Judicial mexicano, alegando riesgos para la democracia y el acuerdo comercial T-MEC, el más importante en Norteamérica.
Los desencuentros se extendieron también hacia el embajador canadiense en México, Graeme Clark, quien igualmente cuestionó este proyecto.
Ante ello, el 27 de agosto, el mandatario mexicano decretó una «pausa» en su lazo con ambos personajes, sin romper la relación diplomática con sus naciones.
T: Sputnik/LRDS