
Sin duda alguna estamos en tiempos de profunda crisis, una crisis del modelo civilizatorio que en su afán de no claudicar o perecer, transmuta y como cual organismo con capacidad de adaptación, se va ubicando y afianzando con el pretexto Covid-19. Son quienes hegemonizan una vez más y son los principales causantes de la crisis y todas sus dimensiones, ellos en este caso y casados con las demás industrias hegemónicas, son nada más y nada menos que quienes pertenecen al “Complejo Médico Industrial Farmacéutico Financiero CMIFF”.
“A pesar de los vaivenes de la economía global, el mercado farmacéutico sigue siendo un complejo entramado productivo, financiero y generador de demanda de consumo masivo con tasas de ganancias extraordinarias para el Siglo XXI: con una cifra de venta total de US$ 1.130 millones para el año 2018; se prevé que alcance los US$ 1.430 millones en 2020”. (1)
La siguiente tabla estadística muestra la evolución anual del volumen de ingresos de la industria farmacéutica a nivel mundial desde 2001 hasta 2019. A lo largo de este período, los ingresos en este sector se incrementaron progresivamente hasta llegar a superar el billón de dólares estadounidenses en los últimos seis años del periodo.

La estructura moderna del sistema transgrede cualquier intento de revertir el orden establecido, es tanto así, que la “rentabilidad” de la actual pandemia la llevan la “Big Pharma” y el entramado Industrial “Big Data Industria”, que ofrece “ventajas modernas basadas en gran acumulación de datos en tiempos increíbles con solo “mover un dedo”, además está basada en la falsa esperanza llamada “inteligencia artificial”, que no es más que la programación y el control de los datos, violando flagrantemente la privacidad de las personas y la soberanía de los Pueblos.
“La industria farmacéutica mundial sigue siendo uno de los sectores más prometedores para los negocios del gran capital transnacional y garantía de tasas de ganancias extraordinarias, con una alta concentración de mercado, donde 15 de las principales compañías farmacéuticas mundiales representan el 51 por ciento (%) de la cuota total del mercado mundial” (1)
La Pandemia por Covid-19, no es la única que actualmente existe, ésta hace sinergia para agravar la crisis, con otras Pandemias que llevan años en nuestro planeta, el VIH-SIDA, la pobreza, la malnutrición, la Diabetes. Todas basadas en profundas desigualdades, agudizadas y agravadas por las brechas de clases existentes. Por eso decimos que ésta es la Pandemia que le faltaba el CMIFF para hegemonizarse, para clavar sus garras sobre la economía mundial y plantarse, incluso con nuevas y esclavistas formas de producción, reproducción y mercadeo, en este último elemento, en un matrimonio indisoluble con la “Big Data Industria” plantan sus modelo neocolonial de dominio de la Salud mental o “neuromarketing”, a través de su más efectiva estrategia: El Miedo.
A través del miedo impreso y manejado desde ambas “Big Industries”, se mantiene el control de lo que debe o no según su lógica perversa adquirir la humanidad, además promocionan como nunca un hecho cultural como la medicalización de la vida, en las que están la automedicación, la sobre medicación, todas propiciadas con una falta de ética que pocas veces se ha visto en la historia, aunque ya era un fenómeno propio del CMIFF.
A este se le suma la vil forma de dominio y acaparamiento de vacunas contra Covid-19 que tienen los países capitalistas, en función de acumularlas y luego endeudar a los países pobres aún más, con la finalidad de mantener el control sobre las demás naciones y no con el fin para las que han sido creadas, acabar con la Pandemia. Es que si ya fuesen querido acabar con la Covid-19, lo hubiesen hecho, liberando las patentes para aumentar la producción de las vacunas, o simplemente usando un tercio de las ganancias que actualmente tienen, ya fuesen producido y vacunado por lo menos dos veces a la población del mundo.
El CMIFF es el cáncer de la humanidad, no queda otra vía que generar condiciones de organización para intentar frenar esta demencia, este afán de instaurar una nueva dictadura mundial, que viola la soberanía de los pueblos e intenta hacerles arrodillar con el poderío ya no sólo militar armamentista sino Médico Farmacéutico.
La estimación de la consultora Torreya (TORREYA, 2018) sobre el tamaño de la industria actualmente la fija en US$ 1,1300 millones (30% más que la estimación previa 2016). Esta estimación es la suma de las ventas netas de las 1.700 compañías más grandes en el sector farmacéutico. El mundo farmacéutico es un pastel de gran valor sectorial, liderado por 17 «big pharma» (valor global de 45% de mercado distribuido entre estas empresas). (1)
Por.- Dr. Ricardo León
Especialista en Medicina Interna e Investigador (OSIMAVEN)
Maestrante en Salud Colectiva (IAES, UBV, UCS)