El de Angostura: Un Congreso en la Guayana liberada por Piar
#Trazos de la Historia/ por ingeniero Ovidio Figueroa Salazar

El 15 de febrero de 1819, en Angostura, llamada Ciudad Bolívar desde 1846, se instaló el Congreso del mismo nombre, tercero de la República ( el segundo se reunió en la Villa de San Felipe de Austria de Cariaco, en nuestro Estado Sucre).
El hecho histórico de la instalación del Congreso de Angostura, tanto por el singular Discurso, del Señor General en Jefe Bolívar,, ya admitido por la gran mayoría de los civiles y militares venezolanos, como Jefe Supremo de la República, como por las ejecutorias de dicho Congreso, comprensible mente ha sido recordado y conmemorado anualmente en la Región Guayana, antes Provincia de igual nombre, por tirios y troyanos, por más de un siglo, incluidas las cuatro décadas bautizadas inexactamente como la Cuarta República, hasta el día de hoy.
El caso es que en ninguno de los gobiernos nacionales, regionales y locales se le ha querido decir a los guayaneses y venezolanos, que ese importante Congreso, desde los puntos de vista político, institucional y vario, se reunió en la capital de. tan extensa provincia, liberada dos años antes por el que llegó a ser General en Jefe Manuel Piar, el casi invicto y famoso General Piar, el más triunfador de los Generales de la Independencia, cuyos restos siguen estando en la Catedral de esa ciudad, exactamente a unos noventa metros de la Casona conocida extensamente como Palacio de Angostura.
Y ese proceder intencional, de ocultar el muy ilustre nombre del padre y conductor del ejército que materializó la trascendental Campaña de Guayana, de 1816-17, que cambio el escenario y el curso de la Guerra de Independencia, dentro y fuera de Venezuela, oscilante entre la victoria y la derrota desde 1810, está muy mal; porque la Historia, la única Historia, la verdadera Historia debe ser enseñada a los venezolanos y latinoamericanos en general, con objetividad, con sentido de justicia para los muchos miles de luchadores, hombres y mujeres de estas tierras, para darle independencia del Imperio Español, que ya llevaba trescientos años de conquista armada y religiosa, y dominio sobre estos espacios, sus habitantes milenarios y sus riquezas.
Sepan los venezolanos y latinoamericanos de hoy y del futuro, que ese Congreso de Angostura, convocado indiscutiblemente por Simón Bolívar, fue posible, y sesiono precisamente en Guayana, gracias al talento estratégico del General Piar; quien dejó testimonio escrito de ello en cartas a Paez del 28 de noviembre del año 16 y al propio Bolívar,, que desaprobó dicha Campaña el 10, 16 y 23 de enero del 17 y le ordenó regresar con el ejercito a Barcelona; en cartas que Piar contestó el 19 de enero, 10 y 18 de febrero de 1817.
Los documentos probatorios de cuanto digo, están en las colecciones del Cura José Félix Blanco y del General O’Leary. Basta de historietas!, digámosle al pueblo la verdad: Si no hubiera sido por Piar’ ese Congreso llevaría otro nombre, hubiera sucedido en otro lugar: Caracas, Valencia, Cumana, Maracaibo, San Felipe, Barcelona, Mérida, Barinas, Barcelona, u otra población. Porque Guayana llevaba siete años siendo mayoritaria, militante y enconadamente enemiga de la Independencia desde fines de 1810.
Así que al conmemorar el aniversario de la primera sesión del histórico e importante Congreso de Angostura, y el extraordinario Discurso de Bolívar, su convocante, o aludir a el, recordemos que fue Piar’, quien dos años antes,, contra la opinión de Bolivar, entregó el suelo guayanés para su instalación y funcionamiento, hasta que fue pasado a Cúcuta.
Ovidio Figueroa/LRDS