
El juez de la Unidad de Garantías Penitenciarias de Guayaquil, Patricio Vidal, aceptó una acción de habeas corpus a favor del exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, quien permanece detenido en la cárcel de máxima seguridad La Roca.
La solicitud fue presentada por la abogada Karen Begonia Gómez con el propósito de que Glas salga de esa penitenciaría de máxima seguridad y sea trasladado a la casa de su madre para recibir atención médica adecuada, alegando que la integridad física y mental de Glas, desde su encarcelación el pasado 6 de abril, “se ha venido deteriorando gradualmente», por lo cual intentó acabar con su vida el 8 de abril y que “la posibilidad de que vuelva a intentarlo es alta”.
Adicionalmente, el documento detalló que “Jorge Glas padece de espondilitis anquilosante, que es una forma de artrosis crónica e incurable, enfermedad que requiere de atención médica especializada y de tratamiento de rehabilitación que la cárcel no puede solventar”.
La abogada insistió en que es imposible que Glas reciba un tratamiento psiquiátrico y psicoterapéutico adecuado dentro de una cárcel, como lo demuestra la manera en la que se le trató el 8 de abril, cuando fue hallado inconsciente en su celda.
El magistrado convocó a una audiencia telemática el miércoles 3 de julio, a las 09:00. A la diligencia también fueron citados a participar el director y el psicólogo de la cárcel La Roca.
De igual manera, el juez ordenó al Ministerio de Salud Pública que a través de los médicos de la penitenciaría se realicen exámenes y valoración médica a Glas y elaboren un informe de su estado de salud, el diagnóstico de sus enfermedades y cuál es el tratamiento a darse.
El equipo de defensa internacional de Glas anunció que apelará al sistema interamericano de justicia para abordar el “secuestro” del político, tras agotar la vía ordinaria nacional.
El exvicegobernante, considerado uno de los símbolos de la persecución judicial o “lawfare” en Ecuador, recibió de forma temporal el beneficio de la prelibertad el 28 de noviembre de 2022, luego de la unificación de dos penas de cárcel de seis y ocho años por los casos Odebrecht y Sobornos; sin embargo, la medida fue revocada.
A inicios de este año, la justicia ordenó su captura por presunto peculado en el caso denominado Reconstrucción de Manabí, que investiga una supuesta malversación en obras públicas tras el terremoto de 2016.
Estuvo en la embajada de México en Quito desde diciembre de 2023 hasta el 5 de abril de este año, día en que uniformados allanaron la legación diplomática para capturarlo por orden del presidente Daniel Noboa.
T: Prensa Latina/RT Actualidad/LRDS