Los líderes de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Suráfrica) exigieron este martes un alto fuego en la Franja de Gaza. Los mandatarios de los cinco países, más lo que se unirán al bloque en enero de 2024, celebraron una Cumbre Extraordinaria de manera virtual en la que se centraron en la implicación de terceros países en el conflicto palestino-israelí, el genocidio de civiles en Gaza y la liberación de los rehenes.
El presidente chino, Xi Jinping, hizo tres propuestas sobre la cuestión palestino-israelí y pidió un alto al fuego para lograr la paz y la seguridad duraderas.
«Todas las partes en los conflictos deben cesar inmediatamente el fuego y las hostilidades, detener toda violencia y ataques contra civiles y liberar a los civiles cautivos para evitar más pérdidas de vidas y sufrimientos», dijo Xi en la cumbre virtual.
Xi señaló que también es menester garantizar la seguridad y la fluidez de los corredores humanitarios, ofrecer más ayuda humanitaria a la población de Gaza, y poner fin al castigo colectivo en formas como el traslado forzado y el corte de suministro de agua, electricidad y combustible, entre otras.
Xi instó a la comunidad internacional que adopte medidas concretas para evitar la escalada de los conflictos y el impacto en la estabilidad de todo Medio Oriente.
El mandatario chino también propuso organizar lo antes posible una «conferencia internacional por la paz» para tratar de resolver el conflicto.
Desde el estallido del último conflicto israelo-palestino, China trabaja activamente para promover negociaciones de paz y un alto el fuego», señaló Xi.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladímir Putin señaló que la catástrofe humanitaria en la Franja de Gaza es «consecuencia directa del deseo de Estados Unidos de monopolizar las funciones de mediación en el arreglo palestino-israelí y de su bloqueo de las actividades del ‘cuarteto’ de mediadores internacionales para Oriente Próximo».
«Así pues, la historia ha demostrado claramente el carácter inviable y contraproducente de los únicos intentos [de Estados Unidos] de cortar el nudo palestino», indicó el jefe de Estado ruso.
También destacó que, debido al sabotaje de las decisiones de la ONU que prevén claramente el establecimiento y la coexistencia pacífica de dos Estados independientes y soberanos, Israel y Palestina, «más de una generación de palestinos se ha criado ya en una atmósfera de injusticia mostrada hacia su pueblo, y los israelíes no pueden garantizar plenamente la seguridad de su Estado».
Al mismo tiempo, agregó que Rusia mantiene una posición coherente sobre la Franja de Gaza e insiste en una solución diplomática del problema.
«Pedimos a la comunidad internacional que unifique esfuerzos para desescalar la situación, cesar el fuego y encontrar una solución política al conflicto palestino-israelí. Los Estados BRICS y los países de la región podrían desempeñar un papel clave en esta labor», subrayó Vladímir Putin.
En sus palabras, es importante evitar que el conflicto se extienda a otros territorios.
«Es importante (…) impedir la implicación de otros Estados en la guerra de Oriente Medio y cualquier expansión de la geografía del conflicto, así como preservar la frágil paz interconfesional», aseguró el presidente.
El desastre humanitario que se observa en la Franja de Gaza plantea graves preocupaciones, declaró el mandatario.
«La muerte de miles de personas, las expulsiones masivas de la población civil y la catástrofe humanitaria [en la Franja de Gaza] son motivo de profunda preocupación», afirmó.
El presidente ruso enfatizó la importancia de pausas humanitarias en la zona del conflicto y explicó que «son necesarias para proseguir con los esfuerzos para liberar a los rehenes y evacuar a los civiles y los ciudadanos extranjeros» del enclave palestino.
El anfitrión de la cita, el presidente de Suráfrica, Cyril Ramaphosa, calificó los actos de Israel en el enclave palestino de Gaza como una violación del derecho Internacional.
«Los actos de Israel constituyen una evidente violación del derecho internacional, de la Carta de la ONU y de las convenciones de Ginebra», destacó el mandatario.
Ramaphosa catalogó además como «un crimen de guerra» los ataques israelíes contra la población palestina que han dejado decenas de miles de muertos, entre ellos muchos niños.
El mandatario sudafricano subrayó que el movimiento palestino Hamás también violó las normas internacionales al tomar rehenes y tendrá que responder.
«La negativa deliberada de proveer medicamentos, carburante, comida y agua a los habitantes de Gaza equivale a un genocidio», añadió.
Ramaphosa pidió un alto el fuego «inmediato y total» y reclamó el despliegue de una fuerza rápida de la ONU para «vigilar el cese de las hostilidades y proteger a los civiles».
«Instamos a la Corte Penal Internacional a iniciar con urgencia una investigación contra los responsables de los crímenes de guerra» en Gaza, afirmó.
Igualmente, el presidente de Irán, Ebrahim Raisi, pidió a los países del grupo BRICS que aprovechen todas sus capacidades económicas y políticas para presionar a Israel.
«Irán quiere que los miembros y los Gobiernos del BRICS (…) utilicen todas sus capacidades y poderes políticos y económicos para presionar a Israel y sus partidarios de los países occidentales», subrayó el mandatario.
En opinión del líder iraní, Washington «perdió la confianza de otros países y pueblos», proporcionando a Israel recursos energéticos y apoyando así la ofensiva israelí contra el pueblo la Franja de Gaza.
Lo que está sucediendo en el enclave, prosiguió Raisi, son «actos de terrorismo y es necesario reconocer el régimen israelí como terrorista y a su ejército como organización terrorista».
El presidente de Irán también llamó a los países del BRICS a que contribuyan a adoptar una resolución vinculante en la Asamblea General de la ONU para detener los ataques a Gaza con ayuda de las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas.
Por su parte, el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, agradeció a su par de Suráfrica, quien presiden los Brics, por la convocatoria y denuncio que lo que vive Gaza es una catástrofe humanitaria.
«Reiteramos el llamado a la liberación inmediata de todos los rehenes. Sin embargo, esos actos bárbaros no justifican el uso de fuerza indiscriminada y desproporcionada contra civiles. Estamos ante una catástrofe humanitaria», dijo.
Recordó que durante la presidencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en octubre, «Brasil no escatimó esfuerzos a favor de afrontar la emergencia humanitaria, contener la actual escalada y retomar una solución duradera al conflicto. Propusimos una Resolución que contó con el apoyo de la mayoría de los miembros, pero que lamentablemente fue vetada por uno de los miembros permanentes. La parálisis del Consejo es otra demostración de la urgencia de su reforma. Sólo el 15 de noviembre, más de 40 días después del inicio de los conflictos, el Consejo de Seguridad aprobó finalmente una Resolución que se centra en uno de los objetivos más esenciales de toda acción humanitaria: la protección de los niños. En este momento, el desafío es garantizar que la tregua humanitaria determinada por la Resolución se implemente de inmediato».
Asimismo, mostró consternación por el número de víctimas.
«El elevado número de muertos (más de 12.000 personas, entre ellos 5.000 niños) nos causa gran consternación. Todavía hay 29.000 heridos y 3.750 desaparecidos, muchos de los cuales son niños. Como bien dijo el Secretario General de las Naciones Unidas, Gaza se está convirtiendo en un cementerio de niños», denunció.
T: Sputnik/Xinhua/Agencias/LRDS