La Organización de las Naciones Unidas (ONU) condenó el bombardeo del aeropuerto internacional de la capital de Siria, Damasco, perpetrado por Israel el 10 de junio pasado, cuando lanzó desde territorio ocupado sirio en los Altos del Golán una andanada de misiles contra esa instalación civil.
Durante su rueda de prensa diaria, el portavoz de la Secretaría General de la ONU, Stéphane Dujarric, mostró la preocupación del secretario general, António Guterres, por el ataque a la terminal aérea.
Dujarric manifestó que “el Secretario General recuerda a todos los interesados que dirigir ataques contra civiles e infraestructuras civiles está estrictamente prohibido por el derecho internacional humanitario”.
El raid de Tel Aviv provocó daños en las pistas, las luces guías, el vestíbulo de la instalación y otros equipos. Todo ello obligó a la suspensión hasta nuevo aviso de los vuelos desde y hacia ese aeropuerto.
Añadió que a Guterres “le preocupa lo que parece ser una escalada de acciones violentas y retórica hostil en toda la región en las últimas semanas, y advierte que el riesgo de un error de cálculo podría llevar a un conflicto más amplio en una región ya inestable”.
El Secretario General también llamó a las partes implicadas a actuar con máxima moderación y evitar una nueva escalada, y ratificó la disposición de la ONU para “ayudar a los Estados miembros a resolver sus diferencias mediante el diálogo”.
T/ Telesur/ LRDS
