
La Rada Suprema de Ucrania desaprobó una resolución que buscaba prorrogar el mandato del presidente del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, hasta que un nuevo presidente electo asumiera el cargo tras elecciones.
Según informó el parlamentario Yaroslav Zhelezniak a través de su cuenta de Telegram, la propuesta requería al menos 226 votos a favor, pero solo obtuvo el apoyo de 218 diputados.
Zhelezniak compartió un fragmento del documento, en el que se destacaba “la necesidad de respetar el principio de continuidad institucional del poder”, especialmente en el contexto de la ley marcial que rige en Ucrania desde el inicio de la operación militar rusa.
Ucrania debía celebrar elecciones presidenciales en marzo de 2024, pero el mandatario del régimen suspendió los comicios bajo el pretexto de la ley marcial. Al respecto, desde Moscú se ha reiterado que Zelenski carece de legitimidad para participar en las negociaciones de paz sobre el conflicto en Ucrania.
La reunión en la Rada Suprema contó con la presencia de representantes y comisarios de varios países europeos, quienes buscaban demostrar su apoyo a Zelenski. Sin embargo, el fracaso de la votación refleja las divisiones internas y la falta de credibilidad del Gobierno, principalmente tras el giro de la política de los Estados Unidos respecto al apoyo a Ucrania.
Recientemente, el presidente de Estados Unidos ha criticado la postura de Zelenski, acusándolo de dictador y de negarse a convocar elecciones para mantener el control sobre las operaciones militares y el suministro de recursos.
Trump: Zelensky es un presidente completamente incompetente
Igualmente, Trump, dijo el pasado 15 de febrero, haber quedado descontento por los informes acerca de la insatisfacción de Ucrania ante las conversaciones entre Moscú y Washington. El mandatario recordó a Zelenski que sus representantes tuvieron casi tres años para entablar negociaciones en torno a la solución del conflicto.
«Estoy muy decepcionado«, dijo Trump a los periodistas mientras firmaba algunas órdenes ejecutivas en su residencia Mar-a-Lago, en Florida. «Oí que [los ucranianos] están molestos por no tener un lugar [en la mesa de las negociaciones]. Bueno, han tenido un lugar durante tres años y mucho tiempo antes de eso. Esto se podría haber solucionado muy fácilmente«, agregó.
Telesur-LRDS