
El candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, abandonó el debate electoral celebrado este viernes en la Cadena Ser tras negarse la candidata de Vox, Rocío Monasterio, a condenar de forma rotunda las amenazas de muerte recibidas por el líder de Podemos, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska y la directora de la Guardia Civil, María Gámez.
«Como se siga blanqueando a la extrema derecha, me voy«, advirtió Iglesias al comienzo del debate, después de que le hayan preguntado por a actitud de Monasterio respecto a las amenazas de muerte. «Pues si es tan valiente, levántese y lárguese, que estaremos todos mejor y es lo que quieren los españoles, que se vaya de la política», replicó la candidata de Vox. En ese momento, Iglesias se marchó insistiendo a los conductores del programa que «no se puede blanquear así a la ultraderecha». «Ahora estamos mejor», dijo Monasterio tras la retirada del candidato de Unidas Podemos.
El resto de los candidatos que participan el debate (Ángel Gabilondo, Mónica García, Rocío Monasterio y Edmundo Bal) cuestionaron a Monasterio, que arremetió contra todos y llamó «activista» a la moderadora del debate y presentadora de la cadena, Angels Barceló. Finalmente, se truncó el debate tras anunciar García y Gabilondo que también lo abandonaban.
El secretario general de Podemos anunció esta mañana que su formación se plantea no compartir «espacios» con Vox, incluidos los debates electorales, si la formación de ultraderecha no condena las amenazas de muerte que el jueves recibieron Iglesias, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez.
En una entrevista en La hora de la 1, el líder de la formación morada conoció las palabras de la candidata de Vox a las elecciones autonómicas, Rocío Monasterio, que ha dudado de que Iglesias, Gámez y Marlaska recibieran misivas con graves amenazas de muerte que contenían balas de un fusil de asalto.
«De Iglesias me creo poco y del Gobierno no nos creemos nada«, aseguró la candidata del partido de ultraderecha. El líder de Podemos, que no conocía las declaraciones de Monasterio, ha considerado «gravísima» esta respuesta y ha avanzado que su formación no compartirá espacios con Vox si no rectifican.
«Pablo Iglesias Turrión, has dejado morir a nuestros padres tu mujer tus padres y tú estáis sentenciados a la pena capital, tu tiempo se agota», rezaba la carta enviada al dirigente de Podemos, una carta que contenía balas de Cetme. Iglesias manifestó estar muy preocupado por las amenazas a su persona y a su familia y ha insistido en que denunciará los hechos.
«Es un error que cuando la ultraderecha dice estas barbaridades se les normalice pretendiendo que se puede discutir con ellos con normalidad. No se puede aceptar en democracia ni el racismo ni el fascismo y yo no puedo estar en un debate con quien pone en cuestión la veracidad de unas amenazas de muerte terroristas», remarcó Iglesias.
El líder de Podemos denunció la deriva de Vox: «La ultraderecha ya no nos señala como rivales ideológicos, como rojos; me llaman rata, chepudo, van directamente al ataque personal sin ningún tipo de límite. Esto hace un daño enorme a la democracia y aunque nosotros vayamos a poner una denuncia, esto hay que pararlo en las urnas porque nos estamos jugando la democracia española».
«Están haciendo amenazas muy graves a nuestra convivencia democrática. Es gravísimo que una fuerza política se atreva abiertamente a hacer propaganda copiada de la propaganda de los nazis. Esto tiene que tener una respuesta democrática», ha insistido.
T/ Público/ LRDS