Un jefe médico fallece en una marcha de reclamo de derechos ante el gobierno de la ciudad de Buenos Aires
“Será un antes y un después de la muerte de Hakim” que se traten ahora las condiciones laborales del sector salud en la Ciudad de Buenos Aires, dijo al medio argentino PáginaI12, Adrián Desiderio, integrante de la Asociación de Médicos Municipales.
Se refiere a la muerte de Alejandro Hakim, jefe médico del Departamento de Ginecología y Obstetricia del Hospital Ramos Mejía, ocurrida por un paro cardiorrespiratorio durante la protesta de médicos de la Ciudad de Buenos Aires realizada el miércoles 3 –justamente el Día del Médico– en el barrio porteño de Parque Patricios.
La muerte de Hakim, de 59 años, impactó no solo a la comunidad médica. Por la situación en la que sucedió, una protesta por mejores condiciones laborales, salarios dignos y reconocimiento de la carrera profesional, su muerte conmocionó a la sociedad. Hakim, además de jefe médico del Ramos Mejía, era profesor de la Facultad de Medicina de la UBA, entocoginecología, y hacía días había asumido la presidencia de Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Buenos Aires.
Hakim tuvo un infarto durante la movilización a la que había asistido con su esposa, también médica de obstetricia del Ramos Mejía. Y para sus colegas, en su muerte se conjugan “junto a problemas de diabetes y sobrepeso”, el estrés y la dedicación que exigió la pandemia.
De ahí que su muerte sintetice, para ellos, “el maltrato y las precarias condiciones laborales” del sector en la ciudad. “Era un trabajador incansable, generoso con sus conocimientos, y un luchador por el reconocimiento profesional del área de enfermería”, agrega Elida Chuquiyauri, licenciada en enfermería del Ramos Mejía, que trabajaba con él.
T/ Página12/ LRDS