El Gobierno Bolivariano de Venezuela celebró la resolución adoptada este jueves por el Consejo de DDHH de la Organización de Naciones Unidas en contra de la imposición de medidas coercitivas unilaterales (MCU).
El ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Yván Gil, a través de un mensaje difundido en la red social X, señaló que la decisión es una «nueva victoria de la Diplomacia Bolivariana de Paz».
Por su prate, el representante permanente ante la sede Ginebra (Suiza) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), embajador Hector Constant, indicó que la resolución adoptada con 32 votos a favor, 13 en contra y dos abstenciones, señala que «ningún Estado puede recurrir o fomentar el recurso a ningún tipo de medida (…), con objeto de coaccionar a otro Estado para obtener de él la subordinación del ejercicio de sus derechos soberanos o para procurarse de él ventajas de cualquier índole…”.
En la resolución aprobada sobre “Derechos humanos y medidas coercitivas unilaterales” se destaca que las medidas coercitivas unilaterales son contrarias al derecho internacional, el derecho internacional humanitario, la Carta y las normas y principios que regulan las relaciones pacíficas entre los Estados.
En el documento, el Consejo de DDHH se declara “profundamente consternado por las repercusiones negativas de las medidas coercitivas unilaterales en el derecho a la vida, el derecho a la salud y la atención médica, el derecho a no pasar hambre, el derecho a un nivel de vida adecuado, a la alimentación, a la educación, al trabajo y a la vivienda, y el derecho al desarrollo”.
Además, la instancia de la ONU expresa su alarma ante los costos humanos desproporcionados e indiscriminados de las sanciones unilaterales y sus efectos negativos para la población civil, en particular las mujeres y los niños, de los Estados contra los cuales van dirigidas.
La resolución acoge con beneplácito y apoya la labor de la Relatora Especial sobre las repercusiones negativas de las medidas coercitivas unilaterales en el disfrute de los derechos humanos, Alena Douhan, y decide prorrogar por un período de tres años su mandato.
Asimismo, solicita a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos que siga dando una gran prioridad a los derechos humanos y las medidas coercitivas unilaterales.
También se exhorta a todos los Gobiernos a que cooperen con la Relatora Especial y la ayuden en su cometido, entre otras acciones.
El tema «medidas coercitivas unilaterales y derechos humanos», formó parte de los paneles de debate de carácter bianual, que se trataron en el 139 período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
T: MPPRE/LRDS
