Venezuela conmemora este 4 de febrero el «Día de la Dignidad Nacional» fecha que recuerda la rebelión cívico-militar que en 1992 lideró el teniente coronel Hugo Chávez Frías considerado un alzamiento de la voz del pueblo contra el neoliberalismo y el capitalismo.
Esa madrugada del 4 de febrero de 1992 el país se levantó en medio de una rebelión protagonizada por jóvenes militares, quienes se proponían frenar el colapso en el que las clases dominantes tenían inmerso al país, reviviendo la esperanza maltratada de un pueblo en su lucha por la construcción de una sociedad más justa.
La rebelión del 4 de febrero de 1992 fue encabezada por Hugo Chávez junto a los soldados del Movimiento Bolivariano MBR-200 contra el sistema político que simbolizaba el Gobierno de Carlos Andrés Pérez, cuyas políticas mantuvieron al pueblo sumido en la pobreza.
Pero, conozcamos un poco más sobre este hecho trascendental en la vida política del país en la opinión del historiador y catedrático Omar Hurtado Rayugsen quien amablemente accedió a conversar con La Radio del Sur.
Señala el historiador que el 4 de febrero de 1992 es el resultado de una suma de traiciones y frustraciones que el pueblo venezolano había venido sufriendo desde la guerra de independencia, donde a su juicio, se había alcanzado una limitada libertad política.
Indica que la historia de esos 200 años está caracterizada por una serie de ascensos de individualidades y de grupos que probablemente querían transformar al país pero luego caían en las garras de los grupos dominantes del momento.
Caracazo fue detonante del 4 de febrero
Hurtado se remonta a los acontecimientos del llamado “Caracazo” ocurrido el 27 de febrero de 1989 y asegura que este sirvió como una especie de campanada para que un grupo de oficiales medios denominados “Los comacates” decidieran insurgir el 4 de febrero de 1992 contra el orden imperante en el momento.
“Era un hecho comprobado que la altos mandos de la Fuerza Armada Nacional estaba altamente comprometida con el orden profundamente antipopular de la época, encabezado por Pérez” agrega.
Recuerda que la masacre ocurrida el 27 y 28 de febrero de 1989 ocurre en medio de la decisión del presidente Carlos Andrés Pérez de aplicar unas medidas dictadas por el Fondo Monetario Internacional que afectaban el salario, las prestaciones sociales y servicios fundamentales de la población, entre estos, el transporte público.
Hurtado precisa que el intento de llevar a la práctica lo que él denomina como una «asociación de intereses antinacionales produjo la reacción del 27 de febrero que todos recordamos tristemente, y de la que aún no se sabe exactamente la cifra de personas fallecidas”.
Asimismo, subraya que los hechos suscitados con el “Caracazo” influyeron en la decisión de la joven oficialidad y nació en ese grupo un deseo de reivindicación de los derechos del pueblo.
“El 4 de febrero, día de la insurgencia, el país entero es sorprendido mientras Venezuela aparentaba billar en los grandes foros del imperio a nivel internacional, en especial en el Foro de Davos de donde regresaba ese día el mandatario nacional”, dijo.
4 F: El Por Ahora de Chávez se convirtió en una proclama histórica
Rememora que la rebelión al mando de Chávez fue derrotada, que el gobierno antipopular asumió el control de la situación y la dirección de la Fuerza Armada lo que condujo a la detención de los militares quienes fueron recluidos en el Cuartel San Carlos y luego en la cárcel de Yare.
Hurtado recuerda que el 26 de marzo de 1994, luego de estar dos años en prisión junto con diez oficiales por la rebelión cívico-militar del 4 de febrero de 1992, el presidente Rafael Caldera le otorga un sobreseimiento a Hugo Chávez quien al salir fue recibido por un pueblo que les agradeció su gesta heroica.
Añade que ya en libertad, Chávez el joven que sorprendió a toda Venezuela y al mundo al expresar ante las pantallas su famoso “Por ahora Los objetivos no se han logrado” se dedicó a recorrer y tomarle el pulso al país lo que lo llevaría años más tarde a cumplir su promesa de tomar el poder político para construir el proyecto socialista.
Califica el inolvidable “Por Ahora” de Chávez como una proclama histórica, «ese mismo por ahora lo hemos estado viendo en los años sucesivos como un presente de transformaciones, en el cual se intenta superar el esquema profundamente excluyente que rigió en Venezuela durante doscientos años», apuntó Hurtado.
Para concluir Hurtado Rayugsen aseveró que en medio de una guerra de nueva generación desatada por el imperio, el país avanza en las áreas educativas y de salud, y en la creación de técnicas propias para suplir los recursos que antes se importaban.
4 de Febrero fue promisorio y el anuncio de una nueva Venezuela
Resalta la toma de consciencia histórica por parte del pueblo lo que demuestra a su parecer que aquel “Por ahora” del 4 de febrero de 1992 fue promisorio y el anuncio de una Venezuela que aún está construcción.
A partir del 04 de febrero de 1992, la construcción de la nueva sociedad venezolana dejó de ser una utopía para convertirse en una necesidad posible, con sujetos y un liderazgo claro capaz de motorizar el proceso revolucionario.
Igualmente, el 4 de febrero de 1992 representa el despertar de un pueblo que se enrumbó en la lucha por el rescate de la dignidad nacional.
Vale destacar que 31 años después y pese a innumerables intentos de desestabilización, sabotaje, intentos de magnicidio, medidas coercitivas unilaterales por parte de factores externos se sigue construyendo la epopeya iniciada en aquellos días en perfecta unión cívico-militar bajo el liderazgo del presidente de la República Nicolás Maduro.
Diosdado Cabello: Sintámonos orgullosos de ese 4 de febrero porque hemos cambiado la historia
