
El Ministerio de Exteriores de Brasil denunció la injerencia del Gobierno de Estados Unidos, después de que éste haya reiterado en la víspera sus acusaciones a las autoridades brasileñas por el proceso judicial contra el expresidente Jair Bolsonaro.
“El Gobierno brasileño deplora y rechaza una vez más las declaraciones del Departamento de Estado y la Embajada de Estados Unidos en Brasilia, que constituyen una nueva injerencia indebida e inaceptable en asuntos de competencia del Poder Judicial brasileño. Dichas declaraciones son incompatibles con la relación de respeto y amistad de 200 años entre ambos países”, señaló la Cancillería en un comunicado.
El Ministerio de Exteriores subrayó que su «soberanía no está ni estará nunca sobre la mesa en ninguna negociación», al reiterar la «politización errónea» por parte de Washington en materia arancelaria.
El titular de la diplomacia, Mauro Viera, recordó que el Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva lleva “negociando con las autoridades estadounidenses desde marzo sobre asuntos arancelarios de interés mutuo y está dispuesto a continuar este diálogo, en beneficio de las economías, los sectores productivos y las poblaciones de ambos países”.
Bolsonaro y otras siete personas se encuentran en el centro de una investigación que los acusa de liderar una asociación criminal, planear un intento violento de abolir el Estado de derecho, promover un golpe de Estado y causar daños al patrimonio público durante las protestas que culminaron en el asalto a las instituciones el 8 de enero de 2023.
Estados Unidos anunció este miércoles el inicio de una investigación de carácter comercial para dilucidar si «las acciones, políticas y prácticas del Gobierno de Brasil» son «irracionales u obstaculizan o restringen el comercio estadounidense».
Las prácticas cuestionadas tienen que ver con el comercio digital y los servicios de pago electrónico, los aranceles preferenciales injustos, la interferencia anticorrupción, la protección de la propiedad intelectual, el acceso al mercado del etanol y la deforestación ilegal, según el comunicado de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos.
«Tras consultar con otras agencias gubernamentales, asesores autorizados y el Congreso, he determinado que las barreras arancelarias y no arancelarias de Brasil ameritan una investigación exhaustiva y, posiblemente, medidas correctivas», dice el comunicado.
La investigación comercial estadounidense se produce en medio de una crisis política entre Brasil y Estados Unidos, iniciada por el presidente Donald Trump, que ha reiterado su apoyo al expresidente brasileño sometido a su juicio «a una caza de brujas».
Trump amenazó la semana pasada con aranceles del 50 % a todos los productos brasileños a partir del 1 de agosto y citó explícitamente el proceso contra Bolsonaro en la carta en la que anunció su decisión.
T: HispanTv/Agencias





