
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia denunció este martes que «la Unión Europea (UE) continúa intensificando las medidas restrictivas unilaterales contra Rusia, ilegítimas desde el punto de vista del derecho internacional y que socavan las prerrogativas del Consejo de Seguridad de la ONU», tras la reciente aprobación de un nuevo paquete de medidas antirrusas.
En respuesta a estas «acciones hostiles», Moscú amplió la lista de representantes de instituciones europeas, países de la UE y otras naciones europeas que «se alinean con la política antirrusa de Bruselas» a los que se les prohíbe la entrada en el territorio ruso.
Detallaron que se trata de funcionarios de agencias de seguridad, organizaciones estatales y comerciales, ciudadanos de la UE y otros países occidentales a quienes Moscú considera «responsables de proporcionar asistencia militar a Kiev, participar en el suministro de productos de doble uso a Ucrania y llevar a cabo actividades dirigidas a socavar la integridad territorial» de Rusia y organizar el bloqueo del movimiento de buques y cargamentos rusos en el mar Báltico.
Las medidas de respuesta de Moscú se aplican también a los representantes europeos «involucrados en la persecución de funcionarios rusos» por la cuestión del conflicto ucraniano, a aquellos «implicados en la creación de un ‘tribunal’ contra los líderes rusos, a partidarios de la confiscación de activos estatales rusos o del uso de sus beneficios en favor del régimen de Kiev», y a los responsables de imponer sanciones antirrusas e intentar dañar las relaciones de Rusia con otros Estados.
La respuesta rusa se extiende a activistas civiles y representantes de la comunidad científica europea que «destacan» por su retórica rusófoba.
«Las acciones hostiles antirrusas no pueden influir en la política de nuestro país», hicieron hincapié desde la Cancillería rusa.
«Rusia continuará defendiendo sus intereses nacionales y protegiendo un nuevo orden mundial justo. Las futuras decisiones sancionadoras de la UE también recibirán una respuesta oportuna y apropiada», concluyeron.
Por su parte, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, en una rueda de prensa tras las negociaciones con la ministra de Asuntos Exteriores de Mozambique, Maria Lucas, señaló que «Europa se enfureció, (…) ahora forman parte del descaro internacional contra Rusia, incitan a sus pueblos de todas las formas posibles, les inculcan que Rusia es un enemigo eterno, una amenaza existencial, que Rusia está a punto de atacar Europa».
Lavrov espera que el enfoque sensato del presidente de EEUU, Donald Trump, «que incluye la disposición al diálogo, la disposición a escuchar y a oír», no pase desapercibido en Europa.
Asimismo, indicó que las provocaciones del régimen de Kiev con atentados terroristas recibirán una respuesta digna. «Rusia alcanzará todos sus objetivos», añadió el ministro.
T: RT Actualidad/Sputnik