Bareiníes protestan contra la visita del presidente israelí a su país
La multitud convocada por el partido opositor bareiní Al-Wefaq expresó su apoyo al pueblo palestino y su causa.

Este viernes, se desarrollaron protestas en Sitra, al sur de Manamá, la capital, y las localidades de Al-Diraz y Karana, donde los manifestantes corearon consignas en rechazo a la visita del presidente israelí, Isaac Herzog, a Baréin.
Algunos portaban carteles con la imagen de Herzog que decían “criminal”, “Fuera Herzog”, y “no eres bienvenido en Baréin”, en rechazo a la visita prevista para el domingo, y que tiene como objetivo la normalización de relaciones con el régimen de Israel.
En este sentido, la multitud, convocada por el partido opositor bareiní Al-Wefaq, quemó banderas israelíes, y expresó su apoyo al pueblo palestino y su causa.
A pesar de que las marchas se realizaron de manera pacífica, la policía antidisturbios recurrió a la fuerza para dispersar a los manifestantes.
Protests against the #Israeli president’s planned visit to #Bahrain & #Manama’s normalization deal with #TelAviv are continuing into Friday evening.
Peaceful demonstrations are being reported in numerous Bahraini towns & villages, including Karrana, Diraz, & Sitra. pic.twitter.com/r9ixAfxOop
— LuaLuaTV (@LuaLuaEnglish) December 2, 2022
Por su parte, el clérigo bareiní, el sheij Isa Ahmad Qasem Isa Qassim, calificó de “vergüenza” y una “profanación” a la nación de Baréin la visita de Herzog a Manamá, al tiempo que ha adjetivó de “traición” la normalización con Israel.
Asimismo, pese a los esfuerzos de las autoridades bareiníes e israelíes para reforzar las medidas de seguridad antes de la visita de Herzog, los llamados de la oposición del reino para boicotear ese viaje están suscitando preocupación entre los funcionarios de seguridad del régimen de Tel Aviv.
Cabe destacar que ésta es la primera visita de un presidente israelí a Baréin, y se ejecuta dos años después de que el régimen de Al Jalifa firmara, pese al rechazo del pueblo, un acuerdo de normalización con el régimen de Israel.
Pasados dos años desde el acercamiento entre Manamá y el régimen de Tel Aviv, la nación bareiní sigue objetando la normalización, acusando a los Al Jalifa de “traicionar” a los palestinos y a todo el mundo musulmán.
Las autoridades locales han prohibido cualquier protesta contra Israel durante la estancia de Herzog en Manamá, lo que muestra cómo las autoridades intentan sofocar las voces disidentes para impulsar lazos con un régimen que carece de cualquier base del apoyo entre el pueblo bareiní.
T/Hispan TV/LRDS