
Tras haber fracasado el lunes en su intento de obtener el voto de confianza de la Asamblea Nacional, François Bayrou llegó este martes al Palacio del Elíseo para presentar su dimisión al presidente francés Emmanuel Macron.
Bayrou llegó poco antes a las 13H30 (11H30 GMT) al Palacio del Elíseo, sede de la presidencia, para presentar su renuncia.
El presidente prometió que nombraría a su sucesor «en los próximos días», pero la tarea se anuncia difícil vista la fragmentación política en la Asamblea Nacional, sin mayorías estables desde 2024.
En junio de ese año, Macron decidió inesperadamente convocar elecciones legislativas anticipadas que dejaron un cámara baja dividida en tres grandes bloques: izquierda, centroderecha –gobernante– y ultraderecha.
Aunque la izquierda ganó los comicios, Macron decidió nombrar como primer ministro al conservador Michel Barnier en septiembre en nombre de la «estabilidad» y al centrista François Bayrou en diciembre. Las oposiciones, que propiciaron la caída de ambos en el Parlamento, ya advirtieron que sin un cambio de política respecto a los ocho años de «macronismo», el nuevo gobierno correría la misma suerte.
Aunque Macron llamó a su gobierno centroderechista a acercarse a la oposición socialista, podría nombrar en cambio a una persona «de confianza», según sus allegados. Desde el lunes por la noche, el nombre que más suena es el del ministro de Defensa, Sébastien Lecornu, que ya estuvo en las quinielas en diciembre.
Los socialistas reclaman en cambio un «gobierno de izquierdas» y proponen suspender la reforma de las pensiones de 2023 y aumentar los impuestos a las grandes fortunas, dos líneas rojas para el oficialismo.
La selección se realizará en medio protestas, apoyadas por la izquierda radical, convocadas para este miércoles. «Bloquearlo todo», el plan de los manifestantes franceses contra el gobierno, pero cuyo alcance se desconoce por el momento.
El jefe de la policía de París, Laurent Nuñez, declaró a BFM TV que se desplegarán 80.000 agentes en todo el país, ya que las autoridades temen intentos de bloquear carreteras y estaciones de tren, así como posibles actos de violencia.
El movimiento «Bloquearlo todo», que se ha extendido rápidamente en las redes sociales, busca un cambio radical.
Los sindicatos también han anunciado una jornada de huelgas y protestas el 18 de septiembre.
La caída del gobierno de Bayrou era ampliamente esperada por los inversores, a pesar de que la deuda francesa sigue bajo presión ante la ausencia de una propuesta presupuestaria para 2026.
El viernes, la agencia Fitch debe revisar la calificación de deuda soberana de Francia. En marzo, la mantuvo en AA- con perspectiva negativa y advirtió que la degradaría si no aplica un «plan creíble» que la reduzca a medio plazo.
Las arcas públicas registraron un déficit del 5,8% del PIB en 2024 y una deuda de casi el 114% en marzo, la más alta de la UE tras Grecia e Italia. Bayrou alertó de la «emergencia vital» que enfrenta Francia, antes de caer.
Muestra de la incertidumbre creciente, el costo del endeudamiento de Francia a 10 años superó este martes el nivel de Italia, considerada durante años como un mal alumno en términos de control de su deuda.
Desde que Emmanuel Macron asumió su primer mandato en 2017, ha tenido un total de seis primeros ministros: Édouard Philippe, Jean Castex, Élisabeth Borne, Gabriel Attal, Michel Barnier y François Bayrou.
T: Agencias