
El presidente de Chile, Gabriel Boric, recibió este martes el segundo proyecto para la nueva Constitución, en una ceremonia que representó el inicio de las campañas rumbo al plebiscito del próximo 17 de diciembre para refrendar el texto con el voto de la ciudadanía.
«Ahora que el trabajo del Consejo Constitucional ha concluido y tenemos una segunda propuesta de Constitución política se abre el tiempo definitivo de los ciudadanos, ahora es su voz y decisión lo que verdaderamente importa (…) confío plenamente en la sabiduría del pueblo chileno, escuchemos y confiemos en el veredicto democrático», dijo en el evento realizado en la sede del Congreso nacional.
Luego de recibir el documento de manos de la presidenta del Consejo Constitucional, Beatriz Hevia, Boric explicó que el Gobierno tiene el deber de generar las condiciones para que cada uno de los ciudadanos pueda tomar una decisión libre e informada.
El presidente señaló que cada votante deberá ponderar cómo el texto permitirá abordar los grandes desafíos en materia de salud, educación, seguridad, medio ambiente, el avance de los derechos de las mujeres y la integración de la diversidad cultural.
Expresó su compromiso de que, de imponerse la opción del apruebo, la ley fundamental será inmediatamente instalada con todas las reformas legales y las adaptaciones reglamentarias correspondientes.
Si, en cambio, la propuesta es rechazada, el gobierno seguirá trabajando sin pausa y con mucha energía por el bienestar de las personas, respondiendo con sentido de urgencia a las demandas sociales planteadas, aseguró.
“Quiero poner este trabajo en manos del pueblo de Chile, que es quien tiene la palabra definitiva”, finalizó Boric.
El presidente explicó que las constituciones no solucionan los problemas inmediatos de las sociedades, pero sí deben dar un marco para que eso suceda a través de las políticas públicas.
«Las constituciones definen en muchos casos el sentido y los límites de estas políticas y eso es lo que tendrá que ponderar cada ciudadano y ciudadana, de qué manera este texto constitucional permitirá abordar los grandes temas de Chile», insistió.
El presidente se mostró institucional y no evidenció una posición con respecto al plebiscito, aunque la semana pasada ya había manifestado su desacuerdo con el nuevo proyecto.
Después de su discurso de este martes, Boric firmó el decreto que oficializó el plebiscito en el que la oposición ya anticipó que promoverá el voto a favor del proyecto, en tanto que el oficialismo lo rechazará.
Un primer proyecto fracasó cuando el 4 de septiembre de 2022 fue rechazado por el 62 por ciento de los votantes y se convocó entonces a un Consejo Constitucional que resultó dominado por la derecha y la extrema derecha.
Dotar al país de una nueva carta magna, capaz de sustituir a la impuesta en 1980 por la dictadura de Augusto Pinochet, fue un mandato popular plasmado en los acuerdos que pusieron fin al estallido social protagonizado por millones de chilenos a partir del 18 de octubre de 2019, cuando la gente salió a las calles a protestar contra la pobreza y el modelo neoliberal vigente.
T: RT Actualidad/Prensa Latina/LRDS