
Decenas de palestinos han muerto este jueves en nuevos bombardeos israelíes que se extienden de norte a sur en la devastada Franja de Gaza y alcanzaron a la Iglesia de la Sagrada Familia, única católica del enclave palestino.
El ataque causó la muerte de cuatro personas entre ellas dos mujeres, otras seis personas resultaron gravemente heridas, mientras que el párroco, el padre argentino Gabriele Romanelli, quien informaba regularmente al difunto papa Francisco sobre la guerra en Gaza, sufrió heridas leves en las piernas.
El Ejército israelí dijo en un comunicado que «lamenta los daños causados» a la Iglesia e informó que «se están analizando las circunstancias del incidente».
El Ejército en su comunicado insiste en que hace «todo lo posible para mitigar los daños a la población civil y a las estructuras civiles, incluidos los lugares religiosos».
Por su parte, el papa León XIV expresó su «profunda tristeza» por el ataque perpetrado este jueves por Israel contra la parroquia de la Sagrada Familia de Gaza y exigió un «inmediato alto el fuego» en Gaza y al «diálogo» entre las partes.
«Su Santidad reitera su llamamiento a un cese inmediato de la violencia, y expresa su profunda esperanza de diálogo, reconciliación y paz permanente en la región», se indica en un telegrama firmado en nombre del pontífice por el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, por el ataque a la iglesia.
En diciembre de 2023, dos meses después del inicio de la invasión israelí en la Franja, un francotirador israelí abrió fuego contra esta parroquia y mató a una madre y una hija, pero hasta este jueves, Israel no había bombardeado directamente esta iglesia.
Según la agencia de la Conferencia Episcopal italiana (SIR), esta parroquia católica acogía actualmente a unos 500 cristianos desplazados por la ofensiva israelí.
Además, de la Iglesia, aviones israelíes atacaron una casa matando a siete miembros de una misma familia en la ciudad de Yabalia. También en el campo de refugiados de Nuseirat, en el centro del enclave, la artillería israelí atacó un grupo de ciudadanos, de los que al menos cuatro fallecieron y en Al Bureij, otros cuatro ciudadanos murieron tras un bombardeo israelí contra su tienda de campaña. En la ciudad Rafah, en el extremo sur de la Franja, convertida ya en ruinas, el Ejército hizo estallar edificios residenciales al noreste de la urbe, reportaron las agencias de noticias.
T: Agencias