Los jefes de la diplomacia de Estados Unidos y Gran Bretaña anunciaron una asistencia adicional a Ucrania, por casi 1.500 millones de dólares durante una visita conjunta a Kiev.
El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, anunció más de 700 millones de dólares en ayuda humanitaria a Ucrania, mientras el secretario de exteriores británico David Lammy confirmó que su país dará 782 millones en asistencia y garantías de préstamos.
La financiación estadounidense incluye 325 millones de dólares para asistencia energética, pero también casi 290 millones de dólares de ayuda humanitaria, explicó Blinken durante una conferencia de prensa, junto a su homólogo británico y ucraniano, Andrí Sibiga.
El jefe de la diplomacia de Washington agregó que el dinero servirá, además, para financiar operaciones de remoción de minas.
Lammy señaló que Reino Unido destinará 242 millones de libras (más de 315 millones de dólares) ya anunciados previamente para este año y el próximo 2025. Estos fondos se destinarán a atender “necesidades humanitarias, energéticas y de estabilización inmediatas, así como para apoyar las reformas, recuperación y reconstrucción” del país.
Asimismo, el Ministerio de Exteriores británico anunció su intención de hacer uso de las garantías de préstamos por valor de más de 370 millones de libras (algo más de 482 millones de dólares) para préstamos del banco Mundial antes de que acabe el año. Estos fondos servirán como apoyo fiscal y para “entregas de equipos militares”.
Lammy incidió en que “el apoyo del Reino Unido a Ucrania es inquebrantable” y resaltó que su país está reservando 3.000 millones de libras (3.900 millones de dólares) al año para ayudar a Ucrania.
«Estamos trabajando con urgencia para garantizar que Ucrania tenga lo que necesita para defenderse eficazmente», dijo Blinken.
El anuncio se produjo mientras Blinken estaba en un inusual viaje conjunto con Lammy, después de que los dos diplomáticos viajaron este miércoles juntos a la capital ucraniana para expresar su compromiso al país en su guerra contra Ucrania.
Pero las relaciones entre Ucrania y sus socios se han tensado por las reiteradas peticiones de Kiev para que Occidente le autorice emplear las armas de largo alcance suministradas por Estados Unidos y otros aliados para atacar objetivos en territorio ruso.
El tema ha adquirido urgencia dada la última adquisición de armas de Rusia, pero los dirigentes occidentales se han mostrado reacios ante esta posibilidad, temiendo que suponga una escalada bélica.
Blinken señaló que iba a “llevar la discusión de regreso a Washington para informar al presidente” Joe Biden.
“Hablando por Estados Unidos, nos hemos ajustado y adaptado conforme han ido cambiando las necesidades, a medida que ha cambiado el campo de batalla. Y no tengo duda de que seguiremos haciéndolo a medida que evolucione», dijo.
El presidente Biden ha permitido que Ucrania dispare misiles proporcionados por Estados Unidos hacia Rusia en defensa propia, pero ha limitado en gran medida la distancia que pueden ser disparados.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo que esperaba hablar con Biden en las próximas semanas durante una visita a Washington, apuntando que la ayuda militar y financiera de Estados Unidos es vital.
Esta visita de los cancilleres también se produce antes del próximo viaje del primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, a Washington en el que tiene previsto reunirse con el presidente Joe Biden en la Casa Blanca el viernes y que la solicitud ucraniana de autorización para atacar objetivos rusos forme parte de la agenda del encuentro.
Lammy dijo que el conflicto que ya dura dos años y medio se encuentra en un momento “crítico” tras la atrevida incursión de Ucrania el mes pasado en la región rusa de Kursk, incluso cuando intenta defenderse contra los ataques aéreos de su vecino en ciudades de todo el país.
Rusia dice que Ucrania tiene ya la autorización
El canciller de Rusia, Serguéi Lavrov, dijo que su Gobierno estima que Kiev cuenta desde hace tiempo con el permiso para atacar el territorio ruso con las armas de largo alcance proporcionadas por las potencias occidentales.
En ese sentido, apuntó que #no tenemos ninguna duda de que la decisión de levantar las restricciones sobre el uso de armas de largo alcance para atacar el territorio de Rusia se tomó hace mucho». Añadió que «ahora están tratando de hacerlo parecer más bonito, más decente, más elegante en el espacio público».
Por otra parte, denunció que especialistas militares de Occidente «están coordinando prácticamente de forma manual los ataques con armas de precisión» lanzados contra objetivos «puramente civiles» en territorio ruso.
T: Agencias/Telesur/LRDS
Blinken y Lammy llegan a Kiev para conversar con Zelenski
