La última medida impulsada por el inquilino saliente de la Casa Blanca, Donald Trump de levantar las numerosas restricciones a Taiwán busca dañar las relaciones entre China y Estados Unidos, destacaron medios locales chinos.
En ese sentido, el Secretario de Estado, Mike Pompeo, anunció el sábado que levantará las restricciones a los contactos entre funcionarios estadounidenses y sus homólogos taiwaneses.
Anunció que el Departamento de Estado anulará las restricciones de larga data sobre cómo los diplomáticos estadounidenses y otros tienen contacto con sus homólogos asiáticos.
🇺🇲🇹🇼🇨🇳 «La declaración reconoce que la relación entre Estados Unidos y Taiwán no necesita, ni debe estar encadenada por restricciones autoimpuestas de nuestra burocracia». La medida facilitará los contactos entre diplomáticos, miembros del ejército y funcionarios con Taipéi. pic.twitter.com/gSllOaDpsI
— Descifrando la Guerra (@descifraguerra) January 9, 2021
El líder de la diplomacia estadounidense indicó que durante varias décadas el Departamento de Estado había creado complejas restricciones internas sobre las interacciones con los diplomáticos taiwaneses para tratar de calmar a Beijing, pero que ya no regirán más.
La prensa china consideró que la medida busca infringir malintencionadamente una cicatriz duradera a los lazos entre China y Estados Unidos.
El levantamiento de las extensas restricciones entre los contactos del gobierno de Estados Unidos con sus homólogos taiwaneses demuestra que Pompeo “sólo está interesado en avivar confrontaciones injustificadas y no tiene ningún interés en la paz mundial”, indicó Xinhua.
Un comentario publicado en línea por CGTN, el canal en inglés de la televisora estatal CCTV, calificó el anuncio de Pompeo de un “acto cobarde de sabotaje” del próximo gobierno de Estados Unidos.
“El gobierno de Trump, en sus intentos continuos de incendiar la casa antes de dejar el puesto, ha cruzado una peligrosa línea roja con China días antes de que el presidente entrante Joe Biden tome el puesto”, decía el comentario.
La decisión estadounidense se conoce en las últimas dos semanas del gobierno de Trump y en un momento de tensión entre Beijing con Washington y Taipei.
China considera a Taiwán una parte de su territorio, y la mayoría de las naciones en el mundo no mantienen relaciones diplomáticas con la isla.
Telesur/La Radio del Sur
