
El papa León XIV rezó este lunes por la paz en Líbano y Oriente Medio, en su segundo día de visita a este país que vive con el temor de un nuevo conflicto abierto con Israel.
Por la mañana, León XIV visitó el monasterio de Annaya, en las montañas del norte de Beirut, que alberga la tumba de Charbel Makhlouf, un monje maronita canonizado en 1977 y reconocido por unir a cristianos, musulmanes y drusos.
Miles de fieles lo recibieron con vítores y lanzaron arroz en señal de júbilo, mientras el papamóvil ascendía por el sinuoso camino hacia el monasterio. El Papa León XIV, en su segundo día de viaje en la Tierra de los Cedros, recorrió más de 40 km desde Beirut y asciende a unos 1.200 metros de altitud para llegar a esta gruta de piedra protegida por una pared de vidrio y alumbrada por una luz tenue que apunta a una tumba estrecha de madera de cedro en la que reposa San Charbel Maklūf, el monje considerado patrón del país, a quien se le atribuyen más de 29 mil milagros de curación, muchos de ellos a través del aceite que, según la tradición, comenzó a brotar ininterrumpidamente de su cuerpo inmediatamente después de la muerte.
«Hoy queremos confiar a la intercesión de San Charbel las necesidades de la Iglesia, del Líbano y del mundo. Para la Iglesia pedimos comunión, unidad… Y para el mundo pedimos paz. En especial la imploramos para el Líbano y para todo el Levante”», dijo.
Después de su visita al monasterio de Annaya, se dirigirá a los obispos y al clero en el santuario de Harissa, también en el norte de Beirut, donde una gigantesca estatua de Nuestra Señora del Líbano domina el Mediterráneo desde una colina escarpada.
También celebrará un evento interreligioso en la plaza de los Mártires, en el centro de Beirut, antes de reunirse con jóvenes en la sede del patriarcado de la Iglesia maronita libanesa, en Bkerke, en las afueras de la capital.
Las autoridades han decretado festivos los días 1 y 2 de diciembre, y han intensificado la seguridad, cerrado carreteras y prohibido las fotografías con drones.
El domingo, el papa pidió a los libaneses que «se queden» en su país, donde el derrumbe económico iniciado en 2019 ha provocado una emigración masiva.
León llegó desde Turquía el domingo en el marco de su primera visita al extranjero como pontífice.
T: Agencias/Vatican News





