Trece proyectiles han impactado esta mañana en el interior de una base militar en Irak que alberga a tropas de Estados Unidos y de otros países de la coalición internacional, como España. Según un medio iraní, helicópteros españoles estarían sobrevolando el área para evaluar el ataque, mientras que el ministerio de Defensa comunica desde Madrid que no ha habido que lamentar víctimas.
Desde Irak, la coalición transmite no sufrió «daños significativos» ni haber sufrido ninguna baja, aunque sí ha mostrado alarma por el uso de proyectiles grad, de fabricación iraní, de mayor calibre que los empleados hasta ahora en este tipo de ataques.
El lanzamiento de proyectiles se habría producido a las 7.20 de la mañana a ocho kilómetros de la base, en Anbar, y la plataforma usada ya ha sido localizada. Aunque el ataque no sido aún reivindicado, parece ser una respuesta simétrica al ataque lanzado el viernes pasado por EE.UU. en territorio de Siria contra instalaciones usadas por las milicias chiíes próximas a Irán e integradas en las Fuerzas Armads Iraquíes.
Se da la circunstancia de que la base atacada de Ain al Asad es la misma que fue objetivo de una lluvia de misiles iraníes, hace un año, como represalia por el asesinato con tron del general iraní Qasem Soleimaní. En esta ocasión, la escalada entre estadounidenses y milicias chiíes ocurre a apenas dos días de la histórica visita del Papa Francico a Irak.
T/ La Vanguardia/ LRDS