La presidenta Xiomara Castro reiteró que las «fuerzas oscuras» internas y externas del 2009, con la complicidad de la mediática corporativa nacional e internacional se reorganizan en Honduras para asestar un nuevo golpe de Estado «que el pueblo debe repeler».
«El plan para destruir mi Gobierno socialista-democrático y el próximo proceso electoral están en marcha», advirtió la mandataria en una cadena nacional de radio y televisión en medio de las tensiones diplomáticas con Estados Unidos, cuya embajadora, Laura Dogu, fue acusada la semana pasada de actos injerencistas en los asuntos internos de Honduras.
La mandataria ratifico que la paz y la seguridad interior de la República están en riesgo, tal y como lo expresó en días anteriores tras las amenazas de la embajadora de Estados Unidos, acusando al jefe de Estado Mayor conjunto de las Fuerzas Armadas y al ministro de defensa de narcotraficantes.
La cadena nacional ocurrió horas después de que la empresa estadounidense InSight Crime publicara un vídeo de hace 11 años de una reunión de narcotraficantes hondureños con políticos locales, entre ellos, el hasta el lunes diputado del gobernante partido Libertad y Refundación (libre), Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta Castro.
“Condeno todo tipo de negociación entre narcotraficantes y políticos”, destacó Castro en su alocución acompañada por el ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez y la titular de defensa, Rixi Moncada. Ambos funcionarios dieron lectura a todos los casos de narcotráfico que están abiertos para investigación en los tribunales de Estados Unidos sin aplicar ninguna selectividad, de los cuales 26 son del Partido Nacional y siete del Liberal.
“Le solicito a la Fiscalía General de la República ejercer drásticas acciones en todos los casos aquí presentados sin ninguna selectividad para el combate a la narcoactividad”, destacó.
La jefa de Estado también pidió al Congreso Nacional donde su partido está en franca minoría, reformar toda la normativa legal para que la fuerza de seguridad del Estado actualmente limitada, combata con fuerza esta criminalidad organizada.
“A la nueva ministra de defensa le ordeno proveer todas las herramientas y la tecnología que requiere las Fuerzas Armadas para impedir que Honduras siga siendo utilizada como puente para el tráfico de la droga que consumen por toneladas en los países de destino”, destacó.
El legislador Zelaya, quien renunció el 2 de septiembre para enfrentar las acusaciones sin los privilegios de inmunidad de la condición de diputado, es hermano del expresidente Manuel Zelaya, derrocado por el golpe militar del 28 de junio de 2009 y esposo de la gobernante.
El 31 de agosto pasado el entonces ministro de Defensa, José Manuel Zelaya, hijo del ex legislador, presentó también su renuncia para defender el honor y prestigio de su padre, quien tras presentarse voluntariamente ante la Fiscalía a declarar, negó vínculos con el narcotráfico y aseguró que la reunión con los narcos fue una trampa que le tendieron.
Sobre el referido video, el expresidente hondureño Manuel Zelaya expresó a medios de prensa que dicho dinero nuca llegó a sus manos y que su hermano Carlos dejó claro tras su declaración voluntaria en el Ministerio Público, que nunca informó a la dirección del Partido Libre sobre esa reunión realizada hace 11 años.
Castro puso fin hace seis días al tratado con Estados Unidos, argumentando que buscaba evitar que Washington lo usara contra militares que le son leales y facilitara un intento de golpe de Estado.
T: Prensa Latina/Sputnik/LRDS