
El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, dijo este viernes tras reunirse con su par chino, Wang Yi, en Kuala Lumpur, que el encuentro de una hora fue «muy constructivo y productivo» que podrá servir para aportar «estabilidad» a las relaciones entre las potencias, enfrentadas por la guerra comercial y crisis como la de Ucrania.
«Ha sido un encuentro muy productivo. No ha sido una negociación, ha sido una reunión positiva. Y es importante que Estados Unidos y China tengan reuniones productivas y contacto regular y comunicación», dijo Rubio a los medios de comunicación tras mantener su primera reunión con su par chino desde que ocupa el cargo al margen de una cumbre de ministros de Relaciones Exteriores de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
«Creo que salimos con la sensación de que hay algunas áreas en las que vamos a poder trabajar juntos», agregó.
Rubio también adelantó que Washington buscará una fecha «adecuada» para que el presidente de EEUU, Donald Trump, visite China.
«El presidente Trump ha sido invitado a visitar China. Es una visita que él quiere hacer y trabajaremos para encontrar la fecha adecuada para ello. Estoy seguro de que sucederá porque los dos presidentes (Trump y Xi Jinping) quieren que suceda», dijo.
Por su parte, la Cancillería china puntualizó en un comunicado que «ambas partes coincidieron en que el encuentro fue positivo, pragmático y constructivo» y ambas potencias acordaron «fortalecer la comunicación y el diálogo».
Las tensiones entre Washington y Pekín incrementaron con el regreso en enero de Donald Trump a la Casa Blanca, quien lanzó una ofensiva arancelaria contra su gran rival económico.
El dirigente republicano llegó a imponer tarifas adicionales del 145% a los productos de China, que respondió con gravámenes del 125% a las importaciones de Estados Unidos.
En mayo, en una reunión en Ginebra, ambas partes acordaron una tregua temporal para reducir significativamente estos aranceles.
La Cancillería china reiteró este viernes que «los aranceles no deben utilizarse como una herramienta para coaccionar o intimidar a otros países, o para interferir en los asuntos internos de otros países».
«La igualdad soberana y la no injerencia en los asuntos internos son principios importantes de la Carta de las Naciones Unidas y normas básicas que rigen las relaciones internacionales», destacó la portavoz Mao Ning.
T: Agencias/Xinhua