
El Gobierno de Argentina anunció nuevas medidas para buscar enfrentar el impacto devaluatorio del poder adquisitivo de los trabajadores nacionales ante la variación del tipo de cambio y la inflación.
El titular de Aduana y nuevo jefe de la recientemente creada Unidad de Renegociación de Precios, Guillermo Michel, junto al secretario de Comercio, Matías Tombolini, anunció un acuerdo de precios con empresas que regirá por 90 días y permitirá incrementos de hasta un cinco por ciento mensuales.
«Teniendo en cuenta la variación del tipo de cambio, somos conscientes de esa variación y para no afectar la mesa de los argentinos y argentinas estamos estableciendo un alivio fiscal a las empresas para que no trasladen el incremento del tipo de cambio al producto que consumen los ciudadanos», recalcó.
En este sentido, Tombolini precisó que han concluido las primeras reuniones con los mayoristas más relevantes del país mientras destacó que también se negoció con los hipermercados “más grandes y representativos”.
“El tiempo transcurrido entre el anuncio del nuevo tipo de cambio fijo por 90 días y las negociaciones que ya comenzaron con empresas de consumo masivo, y continúan mañana, irán permitiendo que se recompongan los stocks”, apuntó el titular de Comercio.
A su vez, abordó la variación del tipo de cambio del 22 por ciento que dispuso el Banco Central de Argentina tras los resultados de las PASO, el cual aseguró “tampoco habilita abusos por parte de las empresas en término de aumento de precios”.
Timbolini indicó que los programas de precios «son una herramienta más que tiene por objetivo consolidar un tipo de herramientas que intentan abordar este flagelo que es la inflación».
De acuerdo con las fuentes oficiales, la inflación alcanzó un pico el pasado mes de abril con 8,4 por ciento. Posteriormente, disminuyó a 7,9 por ciento en mayo, 6 por ciento en junio y un 6,3 por ciento en julio.
El mes pasado el país suramericano registró una inflación interanual del 113,4 por ciento y acumuló un alza de precios del 60,2 por ciento en lo que va de año, de acuerdo con información revelada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
El INDEC reveló que en términos interanuales los rubros con mayor impacto en sus precios fueron los restaurantes y hoteles con el 129,7 por ciento, seguido de las bebidas alcohólicas y el tabaco con el 120,6 por ciento, la comunicación con el 119,3 por ciento y los alimentos con el 116,3 por ciento.
Por su parte, la vivienda y los servicios como agua, electricidad, gas aumentaron el 112 por ciento, la educación el 110,8 por ciento y la salud el 108,9 por ciento, detalló el organismo.
En lo que va de año, la inflación en Argentina ha afectado con mayor fuerza a la hostelería con el 69,1 por ciento, la educación con el 67,7 por ciento, la comunicación con el 66,8 por ciento, y la recreación y cultura con el 66,5 por ciento.
Los precios de los alimentos se incrementaron un 64,5 por ciento en los primeros siete meses del año, mientras los de la salud en un 60,7 por ciento.
En julio, los rubros con mayores variaciones que incluso alcanzaron dos dígitos en un solo mes fueron la comunicación y la recreación y cultura con subidas del 12,2 por ciento y el 11,2 por ciento, respectivamente.
La inflación constituye uno de los principales desafíos en materia económica tanto del actual Gobierno como de la próxima Administración resultante de los comicios presidenciales del próximo 22 de octubre.
A principios de julio, el presidente del Banco Central de Argentina, Miguel Ángel Pesce, aseguró que «la inflación no tiene una solución mágica» y destacó el impacto «grande» de la inercia sobre el aumento vertiginoso de los precios.
T: Telesur/Xinhua/Sputnik/LRDS